No es una habitual de El Hormiguero, de esos que reciben la tarjeta platino, y de hecho, hacía seis años que no se pasaba por el programa. Pero esta noche Pablo Motos ha recibido en el plató de Antena 3 a Victoria Abril, actriz de éxito internacional que ahora tiene un nuevo y jugoso proyecto teatral entre manos.
Nada más verse, Victoria Abril sacó pecho de su trayectoria y enseñó una hormiga. “Es el premio Luis Buñuel a mi carrera. Mis bodas de oro, 50 años ya”, explicaba a todos los presentes, sobre el galardón que había recibido solo un día antes. Y con semejante introducción, el presentador le pidió un titular que resumiese ese medio siglo en el mundo del espectáculo.
“¿Crees que en una frase te los voy a resumir?”, preguntaba con incredulidad la invitada, que luego sí que ofreció una colección de titulares. “Los 25 primeros: el cine de autor. El Un, dos, tres servía para pagar el cine de autor, que lo hacíamos en cooperativa, sin dinero, pero con talento”, comenzó a relatar.
“En la cuarentena, el cine te abandona como el desodorante”, continuó Victoria; sin embargo, en ese momento el público que iba al cine a verla comenzó a escuchar su música y la siguió por los teatros donde actuaba. “La cincuentena se la llevó la televisión francesa, con una serie”, siguió relatando Abril, que nunca quiso hacer una serie. Su participación inicial fue para un telefilme, pero el éxito de audiencias provocó que, durante diez años, continuase la historia con capítulos de hora y media.
“Llegó el covid, nos encerraron, y después me puse a hacer teatro”, contó Victoria, ya sobre tiempos más recientes, sin entrar en las polémicas que tuvo como negacionista del virus. Y ahora “voy a hacer un poco de justicia olímpica con Medusa, la gorgona”. Una obra original que va a representar en el Festival de Teatro Clásico de Mérida.
Pedro Almodóvar
Al hablar de sus primeros años en el cine, Victoria Abril detalló que en sus primeros trabajos era “actriz por no ser secretaria”. Y que fue a raíz de su participación en Cambio de sexo, de Vicente Aranda, “y ahí ya empezó mi carrera”. Motos también le preguntó por Pedro Almodóvar, cineasta con el que ha trabajado en varias películas, y con el que no ha trabajado por una razón muy concreta: “Después de Kika no me ha propuesto ninguna”.
En otro momento de la noche, Pablo Motos puso su nombre artístico sobre la mesa, pues su apellido real es, precisamente, Mérida. Lo eligió cuando comenzó a trabajar con 14 años. “Tener una hija actriz no era el mejor regalo que le podías hacer a tu familia, actriz igual a puta. Era el principio del destape”, narraba, sobre la razón de este apellido.