Amaia desvela a Broncano el dinero que ha devuelto a Hacienda en la Renta: "Ha sido un poco bastante duro"

Dos años después de su última visita, Amaia Romero acudió a La Resistencia este miércoles, 12 de junio. La artista se encuentra en plena promoción de su canción Nanai, que ve la luz este viernes en todas las plataformas digitales.

Como es habitual, tras la entrevista, Romero no se fue del Teatro Príncipe de Madrid sin responder a las preguntas del David Broncano sobre dinero y sexo: "Deberíamos hacer las preguntas clásicas. Hace dos o tres años que no vienes y esto va todo para el Ministerio". 

"La última vez que vine creo que solo hacías la del dinero", recordó la invitada, y Broncano le dio la razón: "Claro. Va pasando el tiempo, cada vez más dinero...". "Ya, va pasando el tiempo. La verdad es que estoy muy contenta", aseguró la de Pamplona. 

Según el presentador de Movistar Plus+, Amaia siempre ha "tenido pasta", pero la entrevistada difería: "Bueno, siempre, siempre... Desde que gané Operación Triunfo. De ahí, hacia arriba". Acto seguido, si bien no daba la cifra exacta, aportaba un detalle que denotaba una boyante situación económica. 

"Bueno, en la Declaración de la Renta, he tenido que pagar como 70.000 euros. Eso ha sido un poco bastante duro", reconoció Romero, dejando a Broncano ojiplático: "¡Uf! Eso es que ha entrado bastante pasta". "Ya venía con la respuesta preparada, la de la Declaración de la Renta. Como ya sabía que ibas a preguntarlo", bromeó la joven de 25 años. 

Amaia tampoco se libró de contestar cuántas relaciones sexuales había mantenido en el último mes, con el sistema de puntos establecido por el programa. Esto es, relaciones "normales", un punto; 'petting', 0,6, y masturbación, 0,2.

"A mucha gente no le gusta el 'petting'", señalaba el comunicador jiennense. "Pero si el 'petting' está genial. Es divertidísimo. En una esquina, ahí, por la noche...", opinó Romero, entre risas.

Tras esta breve discusión, la ganadora de OT 2017 hacía cálculos y ofrecía un número, un 5,2. Sin embargo, luego se lo pensaba mejor, y subía la apuesta a un 6,2: "Vamos a dejarlo ahí. Es que tampoco ha habido mucho".