Tal día como hoy, 5 de julio, hace 41 años, venía al mundo Sofía Cristo, hija del matrimonio formado por Ángel Cristo y Bárbara Rey. La DJ es colaboradora del programa Espejo Público, y en el magacín, sus compañeros han fingido no acordarse de este aniversario. Era mentira. Y es que, al final de la entrega, Nando Escribano entró al plató con una tarta con velas con el número 41.

No somos un equipo tan horrible, sieso y tan antipático”, bromeaba Susanna Griso mientras Escribano acercaba el pastel a Sofía. “Hemos hecho ver que no nos acordábamos del cumpleaños de Sofía. Pero tú te crees, alma mía, que no nos habíamos acordado de tu cumpleaños”, le decía Nando. Tras invitarle a pedir un deseo y soplar las velas para que se cumpla, Espejo Público ofreció un vídeo sobre la colaboradora.

“Hoy es el cumpleaños de Sofía Cristo, una mujer fuerte y valiente que habla sin tapujos de los momentos más complicados de su vida, cuando las adicciones le complican la vida”, introducían en el vídeo. Tras esto, ensalzaban su figura como la de alguien que “consigue seguir adelante y se convierte en todo un ejemplo para la sociedad y para los más jóvenes”.

“Sofía, no olvides nunca que esta es tu casa. Este es tu refugio, en el que encontrar cariño, cuando las cosas van mal. El sitio donde siempre vas a encontrar un abrazo cuando más lo necesites. El lugar en el que te vamos a escuchar sin juzgarte” le decían también a la que fuese concursante de Supervivientes.

Tras esto, Nando le daba una caja de regalo a Sofía, y en el interior había un teléfono, que le invitó a descolgar. “¿Qué tal? ¿Hola?”, preguntaba la colaboradora, hasta encontrar la respuesta de su madre, Bárbara Rey. “Era obvio”, bromeaba Sofía sobre la sorpresa.

Sofía Cristo recibió una llamada de Bárbara Rey.

La llamada de Bárbara Rey

Bárbara, que tuvo algunos problemas con el teléfono, comentó lo “preciosa” que había salido su hija en todas las imágenes que el programa había puesto para felicitarla. “Me faltan las palabras para decirte lo que siento por ti, y para que vea la gente como eres. Pero tienes la suerte de estar ahí, que te quieren y que valoran y transmiten con todo lo que tú dices”, aseguraba la vedet.

Eres lo más bonito que puede ocurrirle a cualquier ser humano de este mundo, y tengo la suerte de que me ocurra a mí y te adoro, te adoro”, añadía Bárbara. Sofía agradecía el gesto y por “cómo me cuidáis y cómo me tratáis”.

“Para mí, mis cumpleaños son superimportantes. Los pasos siempre con mis amigos y con mi madre, mi madre no puede faltar en un cumpleaños mío, y la quiero con toda mi alma”, relataba Sofía. Antes de despedirse, Bárbara volvió a agradecer “el amor y el cariño, que tenéis a mi hija, y en momentos que son difíciles”.