Emotivo cierre de Cuarto Milenio, que, este domingo, 21 de julio, puso el broche a la temporada número 19. Como siempre, Iker Jiménez quiso dar las gracias a los espectadores por su fidelidad, a pesar de haber sido un curso "difícil" por la enorme competencia a la que se ha tenido que enfrentar su espacio. 

"No puede haber más elementos de competencia poderosos. Mucha gente que va de experta en audiencias lee un dato y todo es relativo. La tele no es la de hace 20 años y diría que los resultados tampoco, en su significado más hondo", comenzaba diciendo Jiménez. 

El presentador de Cuatro, "por no decir sobresaliente", valoró la temporada de "notable alto" y sacó pecho de equipo: "Ha sido una odisea complicada que se puede llevar bien con este equipo, trabajando en la misma nave".

El conductor temía repetirse, por lo que 'cedió' la palabra a uno de sus seguidores, Fran, del que había recibido un correo electrónico que le "emocionó profundamente": "Espero que no le moleste a nadie, pero lo tengo que leer para todos ustedes. Me parece el colofón perfecto para esta temporada tan dura". 

"Mi madre, Lourdes, fue diagnosticada de cáncer en grado 4 en noviembre de 2023. La enfermedad ha progresado rápidamente y se encuentra en sus últimos momentos", leyó Iker para la audiencia de Mediaset, mientras poco a poco se le iba quebrando la voz.

Para la progenitora de este seguidor "devoto" de 'la nave del misterio', Cuarto Milenio es "una fuga de la batalla constante que enfrenta" día a día. Compungido y con los ojos llorosos, tras transmitir la carta completa, Iker reconoció que, en la industria televisiva actual, es fácil olvidarse de que los que están detrás de la pantalla son las personas. 

Sin embargo, testimonios de este tipo ponen los pies en el suelo a los que hacen posible el programa. El comunicador ensalzó "la labor profunda que realiza el equipo": "A pesar de que la temporada haya sido dura, todo eso palidece ante el escrito de un seguidor cualquiera". 

"Fran ha hecho el discurso final de temporada mucho mejor que yo. Hasta pronto, amigos", fueron las últimas palabras de Iker Jiménez en este curso. Un curso en el que a Cuarto Milenio le ha tocado vérselas contra toda clase de formatos, algo que también obliga al espectador a elegir, como recordaba Iker. "Y no siempre tienen que elegirnos", zanjó el periodista.