Joaquín Prat se ha ausentado de los mandos de Vamos a ver este miércoles, 24 de julio. Ya este martes, el presentador aseguraba encontrarse indispuesto, aunque pudo desarrollar su labor con normalidad. Esta mañana, Patricia Pardo ha tenido que asumir la conducción principal del programa de Telecinco.
Así lo han podido constatar los espectadores en el enlace de La Mirada Crítica con Vamos a ver. Juan Luis Tena terminaba de enseñar a la audiencia los vídeos más virales del momento y volvía a aparecer en pantalla Ana Terradillos, lista para conectar con Prat.
Sin embargo, la comunicadora vasca no se ha topado con su compañero habitual, sino con Patricia Pardo. Sería ella la que le tomaría el relevo en esta ocasión. Terradillos se ha extrañado: "Hombre, Patricia Pardo, buenos días. ¿Qué haces tú por aquí?".
"Pues creo que Joaquín está convaleciente", anunciaba la presentadora del segundo espacio matinal de la cadena. Eso sí, esta, con el fin de tranquilizar a los televidentes, ha asegurado que no se trata de "nada grave" y que a buen seguro estaría siguiendo el programa.
"Seguro que nos está viendo desde casa a las dos. Le mandamos un beso y le deseamos una pronta recuperación. Que se mejore", ha comentado Pardo. Unos deseos a los que también se ha sumado Ana Terradillos, dando por finalizada La Mirada Crítica: "Todo tuyo, Patri".
En la entrega anterior, mientras daba paso al Club Social de Vamos a ver, Prat aseguró que no se encontraba bien. Los colaboradores, preocupados, se interesaron por su estado de salud, aunque el conductor le restó importancia al asunto.
"Nada, es que me duele todo el cuerpo", desveló Joaquín, que continuó sin mayores problemas al frente del formato producido por Unicorn Content. No es el único rostro del espacio de mañana que está tocado, tal y como explicó Alessandro Lequio este mismo martes.
"Me acaban de llegar los resultados de unos análisis. Tengo el colesterol un poco alto... Tengo que bajar la intensidad", desveló el tertuliano, cuyos compañeros estaban extrañados por lo poco participativo que estaba el Conde en ese punto de la emisión. Y es que su tono firme y severo es ya una constante en los debates del bloque de corazón de Vamos a ver.