El regreso a España de Puigdemont y su huida han provocado un gran bochorno en la opinión pública. Por supuesto, tanto su llegada como la manera en la que ha evadido a la Justicia están copando los titulares de buena parte de la cobertura informativa de la semana, máxime porque ha dejado en un segundo plano la investidura como presidente autonómico de Salvador Illa.
Entre los que ha reaccionado a lo vivido, ha estado Kiko Matamoros. El polemista de Ni que fuéramos Shhh ha estado comentando todo lo sucedido tanto el día de la investidura de Illa y aparición de Puigdemont a su posterior huida. El comentarista del nuevo Sálvame ha estallado contra lo sucedido y, además, puso el foco en una de las figuras que han comentado lo sucedido, Afra Blanco.
“El poder político burlándose del poder judicial”, expresó rotundamente en su cuenta de X (antes Twitter). “Pase lo que pase hoy, estamos ante una de las páginas más tristes, patéticas y ridículas de la historia de la democracia en España. No hay vuelta atrás. ¿Puede haber alguien con medio dedo de frente que se crea que todo esto no estaba más que pactado? Somos la democracia más ridícula del mundo, gracias a unos políticos corrompidos hasta el tuétano”, agregaba, visiblemente molesto.
Matamoros procedió a poner el foco en los tertulianos y diversos opinadores que también han copado distintas tertulias y programas a lo largo de esta semana. “El equipo de información sincronizada demoniza y responsabiliza a Puigdemont y a los Mossos. Sois unos sinvergüenzas serviles sin parangón en la historia del periodismo mundial”, exclamaba.
Fue cuando el ex de Makoke puso el ojo en la sindicalista y colaboradora de Más Vale Tarde, laSexta Xplica y Espejo Público. Convertida en una de las opinadoras más importantes de Atresmedia, ha sorprendido que Matamoros haya cargado concretamente contra la activista. “Menos mal que tenemos a Afra Blanco para poner un poco de objetividad en el debate. No es más simple por imposibilidad biológica. Cuánto daño hace el servilismo a la credibilidad”, sentenciaba.
Duras palabras que no han tenido respuesta de la sindicalista. Eso sí, sus palabras han provocado una ola de reacciones en defensa de la activista. El colaborador del programa de Canal Quickie afirmaba orgulloso ser “un buen ejemplo de vivir de pie y no de rodillas ni subsidiado, un hombre libre de vasallajes y de vuelta de muchas cosas, incluida la dependencia intelectual a grupos y sectas políticas y mediáticas”.
El tertuliano del programa que presenta María Patiño terminaba lanzando una pulla tanto a Illa como al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. “Estoy esperando ansioso la tercera carta a la ciudadanía explicando la actuación del CNI, el ministro del Interior y el Gobierno de España en esta afrenta. No se descarta la implicación de las organizaciones ultraderechistas”, escribía con un claro tono irónico.