Lydia Lozano ha tenido un gran protagonismo en Ni que fuéramos Shhh en la tarde de este jueves. Y es que la periodista palmera ha desvelado que estuvo en conversaciones para participar en la serie sobre Yurena que prepara Netflix, y que estará producida por Javier Calvo y Javier Ambrossi. En concreto, ha detallado que buscaban periodistas de la época del programa Tómbola, donde Yurena (entonces conocida como Tamara) fue en varias ocasiones. Sin embargo, finalmente, se ha caído del proyecto, porque se han decantado por otros perfiles.

Más adelante, Lydia acompañó a Javier de Hoyos en una de las pausas publicitarias. Así, a través de Twitch y YouTube, mientras en TEN se veían anuncios, Lydia habló con los seguidores, que lanzaban todo tipo de preguntas y opiniones a través del chat.

Uno de los mensajes iba dirigido al tema de cada cuánto hay que cambiar el colchón, asunto que se trató en el programa, y así, Lydia apuntó que ella “trabajo mucho en la cama. Por qué, porque me pongo con el ordenador, y leo muchísimo. Pero no veo la tele en la cama, me parece horroroso”, detallaba la colaboradora.

Y uno de esos mensajes iba dirigido a su aspecto. Lydia, córtate el pelo”, le proponía una telespectadora, y Javier de Hoyos aprovechó para preguntarle si se lo cortaría. “Ayer empezaron a decir que si llevo peluca, y no, es mi pelo”, aclaraba, un tanto indignada.

De paso, Lydia aprovechó para desvelar uno de sus secretos de belleza. “Mirad, yo os voy a decir una cosa. Yo me gasto más en pelo que en la cara. Porque una mujer bien peinada...”, afirmaba la canaria. “El otro día fui a la peluquería. Yo siempre llevo el pelo a la altura clavícula, pero como estoy tomando mucho calcio, pues me crece mucho, y me hice el despunte de delante. Entonces, cuando ya me vuelva a dar otra vez la mecha y el retoque, pues me lo cortaré”, sentenciaba.

"No está contenta"

En la conversación con Javier de Hoyos, Lydia también comentó que el día antes, por la noche, salió con una coleta alta, “como Pebbles de los Picapiedra, algo de lo que su compañero quiso un testimonio gráfico. “La gente no está contenta con nada, ni con el pelo de una, ni con los zapatos de otro”, finalizaba Lydia, antes de que se cambiase de tema.