El desayuno es una de las principales comidas del día, para muchos la más importante porque supone alimentar al organismo tras varias horas de ayuno y por suponer un aporte de energía con el que se pueda afrontar toda la jornada en las mejores condiciones y llegar al final del día tras cumplir con todos los quehaceres de cada uno.

Cada uno lo toma de una forma diferente, siendo habitual optar por unas tostadas con tomate o aguacate, o bien optar por untarlas con aceite o mantequilla, que acompañan a un café y/o zumo, aunque también puede haber presencia de otros alimentos como galletas, bollería, etcétera.

Sin embargo, el conocido y televisivo chef español Karlos Arguiñano, tiene claro cuál es su imprescindible para el desayuno, teniendo siempre muy presente su salud y la importancia de mantener una alimentación saludable desde el primer momento del día.

El cocinero vasco recalca la importancia de desayunar proteína, y para ello, apuesta por comer un huevo, un tomate, un poco de jamón o algún otro embutido, cosas a las que le gusta darle para empezar el día con energía, y luego ya se toma el café más tranquilo, pero primero prefiere comer.

La importancia de las proteínas en el desayuno

El desayuno, como decimos, es para muchos la comida más importante del día, pues en ella se aportan los nutrientes y energía necesaria para afrontar toda la jornada. Por este motivo, es de gran importancia disfrutar de un desayuno completo y que sea rico en vitaminas, hidratos de carbono y proteínas, y que aporte aproximadamente un 25% del aporte calórico del día.

Las proteínas, como recalca Karlos Arguiñano, son indispensables para conseguir un desayuno completo, pues tras una noche de ayuno, el cuerpo despierta falto de energía. Aunque habitualmente se concentra el mayor consumo de proteínas en el almuerzo o la cena, es necesario incluirlas en la primera comida del día, pues son claves para el desarrollo y mantenimiento de la masa muscular.

Además de ser necesarias para un buen funcionamiento muscular, la ingesta de proteínas en el desayuno ayuda a sentirse saciados por más tiempo, por lo que contribuirá a no sentir esa sensación de hambre que afecta a la concentración y que acabará por hacer que se acabe picoteando entre comidas.

Para poder obtener proteínas de alta calidad se puede recurrir tanto a alimentos de origen vegetal como animal. En lo que respecta a las proteínas de origen animal, podemos encontrar buenas propuestas para el desayuno en la pechuga de pollo loncheado, pechuga de pavo loncheado, huevos o salmón ahumada, mientras que, de origen vegetal, es buena idea utilizar avena, quinoa, cacahuetes, semillas de calabaza o nueces.

Así es el desayuno perfecto

Desde hace décadas, los expertos en salud y nutrición han realizado estudios a través de los cuales poder arrojar luz acerca de asuntos que siempre han suscitado interés entre los seres humanos, siendo uno de ellos el que tiene que ver con el desayuno. En este sentido, la prestigiosa Universidad de Harvard desveló de la mano de la médico e investigadora Monique Tello, cuál es el desayuno saludable perfecto.

Siendo consciente de que hoy en día los ritmos de vida hacen que haya poco tiempo para desayunar en casa, Tello propone una serie de sencillas ideas para poder cubrir los nutrientes esenciales para arrancar la jornada y recargar las fuentes de energía de una forma sana. De esta manera, recalca que un desayuno tendría que centrarse en el consumo de alimentos de bajo índice glucémico y ricos en proteínas, fibra, vitaminas, minerales y grasas saludables.

Además, deberían evitarse los azúcares simples, la sal y las grasas de mala calidad, lo que implica que no hay que consumir nada de bollería o dulces, ni tampoco pan blanco, embutido, cereales procesados, postres lácteos, zumos, bebidas de cacao o batidos, a pesar de que muchos de estos son parte de la dieta habitual de muchas personas. El motivo de seguir estas indicaciones es que se deben ingerir alimentos que proporcionen energía y la liberen poco a poco, sin crear picos de azúcar en sangre.

Monique Tello considera que los alimentos imprescindibles del desayuno se pueden clasificar en distintos grupos:

  • Vegetales: un buen desayuno debería incluir frutas y verduras congeladas o frescas, y con piel siempre que sea posible.
  • Cereales o granos enteros (integrales) o sin procesar: este tipo de alimentos se pueden integrar en el desayuno a través de pan y otras masas totalmente integrales, avena, trigo, cebada, espelta, centeno, quinoa, amaranto, muesli sin azúcares ni grasas o sal añadida…
  • Proteínas saludables: la Universidad de Harvard recomienda la ingesta de proteínas saludables, que se puede conseguir a través de huevos (no fritos), lácteos que no sean muy grasos, en los que se evite la nata, el queso muy curado o la mantequilla, así como a través de legumbres o carnes magras o fiambre sin grasa, con el mayor porcentaje de carne que se pueda (pechuga de pollo o pavo cocida o asada)
  • Grasas saludables: a la hora del desayuno también debe haber lugar para las grasas, siempre que sean saludables, que pueden ser incluidas a través de frutos secos y semillas (sin sal, azúcar o grasas añadidas), pescado azul, aceite de oliva virgen extra o a través del cada vez más popular aguacate, entre otros productos.

Teniendo en cuenta estas indicaciones se puede llegar a disfrutar de un desayuno saludable y con el aporte de energía necesario para afrontar en las mejores condiciones posibles.