Publicada
Actualizada

Este lunes, 14 de octubre, antes de sumarse a la tertulia cómica, Jorge Marron realizó sus habituales experimentos en la sección de ciencia de El Hormiguero. Eso sí, la primera de estas pruebas dio pie a que Pablo Motos y el colaborador contasen una historia que, por fortuna, quedó en solo un susto. 

"Vamos a comprobar las cosas tan increíbles que se consiguen gracias a la ciencia", avisó Marron a unos intrigados Motos y Malú, la primera invitada de la semana al formato de 7yAcción. En realidad, se trataba de "un invento de 1886", pero tan atractivo visualmente que el programa decidió mostrarlo.

"Es lo que se conoce como el tubo de Kundt, creado por August Kundt, un físico alemán del siglo XIX. Su funcionamiento es sencillo. En un extremo del tubo, se pone un altavoz. El otro extremo, lo sellamos", explicaba el guionista madrileño, enumerando justo después "los elementos" que podían usarse para rellenar el conducto.

"La gente utiliza distintos elementos. Hay gente que utiliza algún tipo de gas que se pueda condensar. O algo que tenga partículas muy pequeñas. Nosotros hemos elegido bolitas de corcho. Pablo y yo lo llamamos 'el asesino silencioso', porque una vez estuvimos a punto de morir con las bolitas esas", desveló Jorge. 

Entre presentador y tertuliano, la audiencia de Antena 3 pudo saber del peligro experimento. "Se nos ocurrió hacer una sección que se llamaba 'guía de supervivencia'. Pues casi nos matamos", comentó el de Talavera de la Reina, entre risas, aunque la situación fuera realmente seria en su momento.

El primer experimento de este lunes en 'El Hormiguero' Atresmedia Televisión

"El primer día, casi nos matamos. Nos queríamos tirar a una avalancha de nieve, pero, como no había nieve, nos tiramos a esto", explicó del conductor de El Hormiguero, señalando las bolitas de corcho. Marron proseguía: "Se nos arrancaron las máscaras que llevábamos y se nos llenaron las vías respiratorias con bolitas de estas". 

"Ahora, mucha risa, pero estuvimos una semana que hacíamos caca que flotaba", bromeó Jorge, y Pablo se sumaba a los chistes: "Sí, eran como Ferrero Rocher". "Bueno, no vamos a dar más datos de esta movida", zanjó su compañero, con la cantante invitada atenta a la explicación. 

Acto seguido, Jorge Marron pulsó un teclado para que las bolitas fuesen distribuyéndose por el tubo, accionadas por la vibración del sonido. El Hormiguero se valió de la cámara súper lenta para ofrecer una toma más espectacular del movimiento.