Publicada
Actualizada

Durante bastante tiempo, Sálvame, en Telecinco, tuvo un programa derivado llamado La última cena, en la que dos colaboradores tenían que elaborar diferentes platos para conquistar el estómago de sus compañeros. Así, durante la tarde, les veíamos cocinar y ponerse, en ocasiones, en situaciones complicadas (y también surrealistas).

Ni que fuéramos Shhh, que bebe del espíritu de aquel Sálvame, estrenó en su segunda temporada una zona de cocinas, y, por ello, es frecuente ver a los colaboradores o a la presentadora elaborando algún plato. Ya sin competiciones, solo por el simple gusto de cocinar para los demás trabajadores del equipo.

Algunos, como Belén Esteban, demuestran tener gran dominio de la cocina casera, de la de toda la vida (aunque haya unos días en los que brille más que en otros). María Patiño, sin embargo, demuestra que no conoce mucho el arte de los fogones, y esto ha sido aprovechado por el programa como una baza. Y es que ponen a María a cocinar a pesar de no tener ni idea, dejando resultados curiosos. 

Esta semana, sin ir más lejos, la lio de lo lindo elaborando una tortilla de patatas a la que no supo dar la vuelta. Y, por si fuese poco, esta tarde ha tenido como reto elaborar un flan de chocolate con leche condensada y natillas. No la dejaron a su libre albedrío: tenía unas instrucciones, paso a paso, pero de poco sirvieron.

El programa estaba tratando las novedades del libro que lanza Lydia Lozano contando sus vivencias, con episodios dedicados a Al Bano o a su marido Charly, cuando David Valldeperas hizo un llamamiento urgente. “Belén, creo que tenemos una emergencia en la cocina, porque María está tirando todo dentro de los moldes”, advertía el director. “¿Y qué quieres que haga?”, se preguntaba Belén. 

David apuntó a María que la mezcla tenía que hacerla en un bol, y luego rellenar los moldes. La presentadora estaba echando los ingredientes, como la leche y los huevos, directamente en los moldes, y allí pretendía batirlos; por eso pedía a Belén que le echase una mano.

“Voy a decir una cosa, un momento. Yo te prometo que estoy poniendo mi empeño. (…) Para estar haciéndoos sufrir a vosotros, hacer un gasto económico, que el público se enfade conmigo y que yo me vaya a mi casa jodida, es que no compensa, no hay nada positivo”, lamentaba la presentadora.

María Patiño, elaborando el flan de chocolate.

“Te juro, David, que estoy leyendo detalladamente las instrucciones y es lo que yo entiendo”, se justificaba a continuación la gallega. “Igual no entiendes el castellano”, le deslizaba el director, provocando un enfado mayor en María. Tras explicarle a Patiño que “bol y molde no es lo mismo”, le dijeron de viva voz que tenía que echar los ingredientes en un bol, batirlo bien, y luego rellenar los moldes. Belén intentó tranquilizarla, y se puso a hacer los flanes, sacando los ingredientes de los moldes donde los había echado su compañera.