Las consecuencias de la tragedia de la DANA en el Levante, con la Comunidad Valenciana como principal epicentro, siguen siendo el principal problema que asola a la sociedad española en este momento. Pero, en medio de la destrucción y poco a poco, la vida se está abriendo paso y lo hace de una manera inesperada y conmovedora.
En esta misma tarde del viernes 8 de noviembre, Al Rojo Vivo era testigo de un momento de lo más entrañable. Tania Palazón y Adrián García son dos vecinos de la localidad valenciana de Benetússer. Ambos tenían previsto casarse en esta misma jornada. Aunque se han visto obligados a aplazar el convite y el viaje de la luna de miel, la alcaldía les propuso mantener la fecha.
Como gesto de esperanza, ambos han optado por darse el ‘sí quiero’. Se trata de una firma de compromiso, siendo un enlace legal, pero alejado de lo habitual de las celebraciones matrimoniales, las cuales Tania y Adrián han aplazado. La pareja ha contraído las nupcias ante la mirada de dos testigos y los vecinos más próximos, dado que sus familiares no pudieron acudir al enlace.
La alcaldesa de la localidad, Eva Sanz (PSPV), ha sido la encargada de oficiar la ceremonia civil, que se produjo en el salón de plenos del Ayuntamiento. Al enlace acudió también Ana Martín, primera teniente de alcalde. La pareja decidió contraer matrimonio después de una llamada del responsable de prensa y protocolo del municipio, dado que se habían olvidado completamente de la fecha. “Ni siquiera sabíamos si el edificio del Ayuntamiento estaba bien”, confesaba la novia a medios locales.
Tania y Adrián se convierten así en la primera pareja en casarse en una de las zonas cero de la DANA. Ambos llevaban como trajes sus botas de agua y barro bajo sus pies. Lo han hecho con la ropa de la empresa que tenían, Electrofio Adrigal S.L., la cual ha quedado arrasada por la tormenta. “No nos queda nada de la empresa que teníamos, lo hemos perdido todo”, expresaba Tania.
Marina Valdés, reportera de Al Rojo Vivo, ha sido quien ha captado la historia de esta pareja, quienes han explicado a laSexta que la boda “es una señal de que la vida sigue”, a pesar del desastre. Las imágenes de Tania y Adrián con sus botas y su ropa de trabajo, tras perder herramientas y vehículos de la empresa donde trabajan, han conmovido a la audiencia y a los vecinos de la comunidad.