Un miércoles más, Martínez y hermanos volvió uniendo a tres rostros conocidos: los actores Carlos Areces y Juana Acosta y la cantante Chenoa. La artista mallorquina acudía para presentar su nuevo single, La línea del tiempo. Un regreso a la música de lo más esperado. En su visita al formato producido por Fremantle, dejó una anécdota de lo más surrealista relacionada con Mariah Carey.
Todo vino a raíz de la pregunta de David Martínez sobre el momento más incómodo que los invitados hayan vivido junto con otras ‘celebrities’. Fue, en ese momento, cuando la cantante nacida en Mar de Plata habló sobre lo que vivió con la artista de We Belong Together. “Yo me presenté a un concurso donde nadie quiso ir y me mandaron a mí”, explicaba.
“Me dijeron que cantase una canción que me gustase y canté It’s Raining Men y gané. De ser la cuarta a poder ganar algo, pensé que ‘qué guay’. Y el premio lo entregaba Mariah Carey”, proseguía en su narración.
Fue, en ese momento, cuando Chenoa vio que la diva nacida en el pueblo neoyorkino de Huntington “llevaba los abdominales maquillados”. “Iba muy tuneada”, expresaba ante la mirada atónita de David Martínez. Aunque lo más surrealista fue cuando, de la emoción, quiso abrazar a la estrella estadounidense y ésta la apartó para evitar que le tocase los abdominales y se descubriera el misterio.
“No quería que le borrara con las lágrimas nada de eso. Flipé un poco en colores. Dije 'Voy a centrarme en mi momento' y no eché cuenta”, confesaba la artista. Tras ello, Areces le pidió a Chenoa si era capaz de recrear la situación. La artista aceptó, teniendo la ayuda del presentador. Ahí fue cuando reveló otro dato: tales eran los nervios de Carey por ser descubierta, que la apartó de un empujón.
“Me empujó pero no me importó porque ella es la reina de la Navidad”, reconocía. Una curiosa anécdota que no fue la única confesión que dio la juez de Tu cara me suena. Chenoa reconocía en el programa de Cuatro que “siempre” ha sufrido del Síndrome del Impostor. Se trata de un fenómeno psicológico que afecta a personas que, aunque sean reconocidas por su labor, sienten que no merecen dichos logros.
“Mi madre me pegó hace unos días una charla como si tuviera cinco años. Me dijo 'Laura, stop'. Que me hable bien, porque me había escuchado hablarme mal”, expresaba a David Martínez. A pesar de su dilatada carrera y de ser considerada una cantante consagrada, la artista todavía tiene dudas sobre sí misma.
Precisamente, su faceta profesional está teniendo un buen momento. Muy aplaudido es su labor como presentadora de Operación Triunfo. Su nuevo single, La línea del tiempo, está siendo bien recibido por sus fans. Además de seguir siendo jurado en el exitoso talent show de Antena 3, próximamente se le verá como conductora en The Floor. El concurso que presentó Manel Fuentes en Atresmedia pasará a TVE el próximo año, con la hispano-argentina liderando esta nueva etapa.