Casi tres meses de su visita conjunta con María Patiño, Belén Esteban regresó a La Revuelta este miércoles, 18 de diciembre. Lo hizo con motivo de las Campanadas que presentarán David Broncano y Lalachus el próximo día 31. Precisamente, la de Paracuellos estuvo en esa situación para despedir el año 2009 en Telecinco, junto a Jorge Javier Vázquez.
Esteban reconoció que esa Nochevieja fue "uno de los mejores momentos" que ha vivido en su vida y que lloró bastante. Acto seguido, se interesaba por "el balcón" de la Puerta del Sol que le habían dado a la pública. "Mediaset nos dio un piso que no pudimos pasar más frío, tío", explicó.
"Aquí, como es Televisión Española, te lo dan con okupas", soltó Grison. Según Belén, no había de qué preocuparse: la Corporación se queda con "el mejor" sitio desde el que se ve el reloj de la plaza madrileña, el más alto. "Te puedes asomar, mirar abajo y ver cómo va la Cristina Pedroche", señaló la colaboradora de Ni que fuéramos Shhh.
"Estaría guay romperle la exclusiva", comentó Broncano, en tono jocoso. Minutos después, Belén Esteban contaba algunos secretos de su experiencia, de la que han pasado ya 15 años. "¿Puedes ponerte pantuflas y eso? Porque los pies no se ven", quiso saber la colaboradora de La Revuelta.
"Sí, sí puedes. A mí la verdad es que Mediaset me buscó un vestido de Versace que no sé cómo me lo pudieron meter. Tenía las tetas... Pero yo lo aguanté ahí", aceptó, orgullosa, Esteban, añadiendo: "Es verdad que hace mucho frío, pero llevas un abrigo. Cuando vas a salir, te lo quitan y te retocan".
Además, Belén aprovechaba para contar una anécdota: "Mi niña era pequeña entonces y me la llevé. ¿Sabes lo que me hizo la niña? Me dejó ahí tirada y se fue a ver a la Anne Igartiburu. ¡Manda huevos! Luego volvió con su mamá". Tampoco se cortaba hablando de que a Isabel Pantoja, que dio las Campanadas de Telecinco dos años después, le habían pagado más, pese a hacer una audiencia similar.
"Isabel Pantoja hizo medio punto más que yo, nada más, pero a ella le pagaron una pasta y a mí una mierda", exponía la madrileña, desatando las risas de Broncano, Lalachus y todos los allí presentes. Por último, daba un consejo de vestuario al jiennense: "A mí me molas de negro, con un traje negro". Incluso le proponía "unos brillos" en el atuendo.