La polémica con Karla Sofía Gascón ha alcanzado cotas inimaginables. La filtración interesada de una serie de posts que publicó en su cuenta de X hace unos años, en los que vertía comentarios racistas, xenófobos y en los que criticaba fuertemente al islam, han dejado consecuencias dignas de la película Arthur Rambo de Laurent Cantet. En apenas una semana, la intérprete de Alcobendas ha sido plenamente cancelada.

Ganadora del galardón a la mejor actriz en los Premios de Cine Europeo, la protagonista de Emilia Pérez, convirtiéndose en la primera intérprete transexual en alzarse con dicho reconocimiento, su narrativa era ideal para los Premios Oscar. Gascón hacía historia al ser la primera persona abiertamente transexual en optar a la estatuilla en las categorías interpretativas (Elliot Page lo hizo antes de su transición y de declararse hombre trans).

Sin embargo, sus posts han provocado que su distribuidora en Estados Unidos, Netflix, haya optado por apartarla de las campañas de los Oscar. La plataforma en streaming ha optado también por no correr con los gastos de la artista en caso de que quiera acudir a las distintas ceremonias de los premios a los que se le ha nominado (no estará en los Critics Choice Awards, que se celebran este 7 de febrero).

Con su presencia en los Oscar corriendo peligro (con una fuerte campaña por parte de ciertos medios de comunicación estadounidenses buscando que se la descalifique en la terna de nominadas a la mejor actriz), ha sido rápidamente criticada por Jacques Audiard, en una dura entrevista para Deadline, así como por Zoe Saldaña, quien busca evitar perder su condición de favorita a la estatuilla a la mejor actriz de reparto. La guinda del pastel la ha vivido Gascón estos días en su tierra natal.

Con el ministro de Cultura, Ernest Urstaun afeando sus antiguos posts y la editorial Dos Bigotes anunciando que no publicará la revisión de su autobiografía, Karsia, la Academia de Cine Española ha anunciado que Gascón tampoco estará presente en la gala de los Premios Goya en Granada. La cinta Emilia Pérez, candidata a la mejor película europea, será representada por los distribuidores del film en España, Wanda Visión y Elastica Films.

Esta polémica se ha abordado en diferentes magacines de actualidad, como El programa de Ana Rosa. La presentadora ha salido en defensa de la actriz, señalando que Gascón ha sido doblemente cancelada: “por ser mujer trans” y ”por sus ideas”. Quintana ha señalado que se le está “destrozando”.

“Perdóneme la Academia del Cine. ¿Cómo que Karla Sofía no iba a estar invitada a los Goya? Aunque ella no fuera a recoger el premio, si está nominada la Oscar. No tiene sentido”, comenzaba en su intervención Quintana. “Se están lavando las manos”, apostillaba Máximo Huerta, visiblemente molesto.

“Les están haciendo un flaco favor a los actores, a las actrices y a los productores, porque les gustaría tener una estrella internacional en los Goya. Lo de decir que no estaba invitada es una forma fea de lavarse las manos para que no esté Karla. ¿Qué ha sido cretina e imprudente? Sí, pero su trabajo es lo que debe valorarse”, defendía el también escritor. “¿Por qué exigimos la perfección a las minorías?”, dijo el exministro.

Quintana no dudó también en salir en defensa de Gascón, a pesar de sus comentarios. “Están exigiendo que la mujer trans deba ser progre. Es verdad que ella se ha pasado un poco al otro extremo. Pero tiene derecho serlo [una mujer de derechas]. A mí, sus comentarios no me gustan, pero está la libertad de expresión, ¿o sólo está para algunos?”, señalaba la presentadora.

“Estamos en un tiempo en lo que piensa la persona pública se valora más de lo que hace”, denunciaba Huerta, quien tampoco estaba de acuerdo con las opiniones “mezquinas” de la actriz, pero también se mostraba en contra de cómo se le ha condenado al ostracismo. “Que cada uno opine lo que quiera, aunque no se esté de acuerdo”, expresaba.

“Va a ver una gala de los Goya en la que se va a hablar mucho de Trump”, predecía Quintana, quien terminaba su intervención invitando a Gascón a sentarse en su plató, donde era bienvenida. “Karla Sofía, estás invitada a esta mesa. Nosotros no te cancelamos”, expresaba la conductora, defendiéndola así públicamente.