"Llegaste al plató de Fiesta, lo revolucionaste e hiciste lo que te salió del moño". Así describía Emma García la primera visita de Kike Quintana a su programa. Sucedió hace unas semanas y este domingo, 16 de febrero, regresó para ajustar cuentas con la presentadora y los colaboradores.
En los rótulos ya se avisaba: "El 'sobrinísimo' viene a Fiesta y va a sufrir". "Vine un primer día a presentarme, a que me aceptases", comentaba el sobrino de Ana Rosa a la conductora de Telecinco, que le pidió que se arrimase para que los espectadores vieran el "parejón" que hacen en pantalla.
"Esto es lo que hace falta en este programa para que la audiencia vaya hacia arriba", soltó Quintana, y García no dudó en responder a este ataque: "Oye, te digo una cosa, no estamos mal con la audiencia". "Ni bien tampoco", respondió él, con ánimo de 'picar' a su compañera.
"No, no. Estamos más bien que mal, ¿eh? Si tenemos que elegir, estamos más bien que mal, que tú lo sepas. Ahora, que siempre se puede estar mejor. Y yo lo agradezco todo", insistió Emma. "Yo diría, por apostillar, que 'regulinchi", remarcó Kike.
Ya en su visita anterior, el 'agitador' de Tardear hacía alusión a los datos que marca el formato de Unicorn Content cada fin de semana en la cadena de Mediaset: "Si tenéis audiencia, es porque no cambian de canal".
Kike Quintana y Emma García, en 'Fiesta'.
Lo cierto es que las audiencias del vespertino están marcadas por la irregularidad, ya que en las últimas semanas ha llegado a alcanzar el 10,3% de cuota de pantalla o a bajar hasta el 7,7%. Febrero, por el momento, está siendo un mes estable: Fiesta promedia un 9,6% de share y 929.000 espectadores.
Antes de que el 'sobrinísimo' se sometiese al juicio de los tertulianos de Fiesta, Kike Quintana se sinceraba sobre la vuelta de su tía a las mañanas de Telecinco: "Lo estoy pasando mal porque se me ha ido la tita, que me metía mucho con ella. También se ha ido [Manu] Marlasca, que era una fábrica de contenido".
"He venido aquí a hacer terapia", reconocía Quintana, que se guardaba en la manga un 'dardo' para su compañera Leticia Requejo, a la que ve "subida" en Tardear por haber ganado importancia en el programa: "No solo brilla, sino que intenta apagar la luz de los demás".