Luciendo un bigote al que no nos tiene acostumbrados, Mario Casas llegaba este jueves a El Hormiguero en lo que suponía su visita número 24, y la segunda que realiza en la presente temporada. Un detalle facial que Pablo Motos, nada más verle, tuvo que comentar. “Estoy con una peli ahora”, se justificaba el actor. “Si te pongo una gorra roja eres Mario Bross”, bromeaba el presentador, y ahí, Mario reconoció que si no fuese por el trabajo no lo llevaría: “Me gusta más ir afeitadito”.
En esta ocasión, el artista acudía al magacín a promocionar El secreto del orfebre, un largometraje que se estrena el 28 de febrero. Sobre el título, Mario bromeó conque no podía contar mucho, porque es un secreto.
“Es una historia de amor romántica, una película de las de antes, de enamorarte. Hago de un orfebre, que con 18 años vive un amor de verano. 20 años después vuelvo a este pueblo y vuelvo a encontrarme con esa mujer”, apuntaba sobre la trama de la cinta.
Con la película como percha, Pablo Motos quiso saber si el actor recuerda cuál fue su primer amor. “Tendría 12 o 13 años”, admitía Mario Casas, señalando que fue una historia que “te pega”. Se trata de una chica que conoció en Marina d'Or, estando de vacaciones.
“Me enamoré locamente”, apuntaba. La conoció en una fiesta de la que organizaban los hoteles, y “fue la primera vez y se me quedó grabado”. La historia no cuajó, “puede ser que pasó de mí. Entonces era muy bajito”. “A ver ahora, como han pasado 20 o 25 años, si vuelvo de vacaciones a lo mejor hay suerte”, bromeaba en ese mismo sentido.
Adiós a los vicios
Más adelante, Pablo Motos puso sobre la mesa cómo Mario ha dejado de beber alcohol. “Y de fumar”, añadía él, sacando pecho. En concreto, hace mes y medio que dejó el tabaco, y resumía la experiencia como: “no le estoy dando de comer al monstruo”.
El actor reflexionó cómo al dejar los hábitos todo cambia, a nivel social e, incluso, la manera de comer o de pensar. “El alcohol es más social cuando sales, pero quítatelo, verás como cuesta cuando te relacionas con los demás si no hay una cerveza de por medio, dos, tres”, lanzaba.
En la actualidad, para Casas “el deporte es como comer”. “Realmente el dejar los vicios atrás, hacer deporte, intentar descansar, te cambia la vida”, afirmaba también. Este cambio de hábitos provoca que en la actualidad no aguante de fiesta mucho más allá de las dos de la mañana.
Luego, Mario realizó una comparación entre el boxeo y la actuación. “En la interpretación es lo mismo: esperas que el que tienes enfrente diga su frase. La interpretación está en la escucha, ver qué hace, como se mueve, y el boxeo es igual, moverse y ver cómo se comporta el que tienes enfrente”, finalizaba.