Ana Garcés y Arturo Sancho son los culpables de que los espectadores estén atrapados cada tarde, y desde hace más de dos años, a las tramas de La Promesa. La historia creada por Josep Cister no sólo trajo de vuelta al culebrón clásico a las sobremesas de La 1, sino que el trabajo de Bambú se ha visto recompensado con el Emmy Internacional a la mejor telenovela.
"El Emmy lo notaremos más cuando este proyecto acabe porque ahora mismo, es el reconocimiento a todo el equipo de la serie. Es una maravilla verlo en la oficina, pero yo diría que no nos ha cambiado nada, aparte del orgullo de haber ganado el premio más prestigioso a nivel internacional de las series", asegura a BLUPER el actor que da vida a Manuel de Luján y Ezquerdo.
En la serie, su personaje esta felizmente casado con Jana, de la que espera su primer vástago. Sin embargo, su matrimonio se verá a raíz de que ella haya descubierto que Cruz (Eva Martín) sea la asesina de Tomás (Jordi Coll), su cuñado. Además, todo ha dado un giro de 180 grados al salir a la luz el gran secreto de Jana.
Lo cierto es que La Promesa atraviesa un extraordinario momento en materia de audiencia, llegando a alcanzar el 15% de share. Pero, ¿les ha cambiado el éxito a los protagonistas de este melodrama? "¿Aparte del bigote?", repregunta con gracia Arturo, que más serio añade: "Ha cambiado el trabajo. Trabajamos muchas horas porque nos involucramos mucho en esta serie".
Y es que el compromiso del elenco es total, tal y como contaba el cerebro de la serie a este periódico. "Nos gusta lo que hacemos y la audiencia nos acompaña de una manera tan fiel que nos impulsa a hacerlo con todo el cariño del mundo", dice.
Arturo Sancho interpreta a Manuel en 'La Promesa'.
Arturo, además, confiesa que el vertiginoso ritmo que tiene una diaria les deja "poco tiempo para tener vida personal". "Solemos quedar para tomar algo, hacer una escapadita de fin de semana por ahí y estar con nuestras familias", cuenta el de Bilbao.
"Un formato diario es un trabajo muy gordo, para lo bueno y para lo malo. Es una escuela brutal, aprendes muchísimo, ruedas todos los días con una cantidad de texto ingente. La gente incluso nos pregunta si tenemos pinganillo. No hay pinganillo. Tenemos que estudiar y darlo todo", reflexiona Arturo, que tira del cariño del público para afrontar las jornadas de trabajo.
"La gente incluso nos pregunta si tenemos pinganillo. No hay pinganillo. Tenemos que estudiar y darlo todo"
El actor entiende perfectamente que algunos compañeros hayan decidido irse de La Promesa para afrontar nuevos retos. "Hay veces que, como actor, sientes que tienes que parar. Ha habido compañeros que les ha pasado porque esto es un volumen muy grande de trabajo, pero otras veces lo piensas y continuas. Esta es la parte más dura o negativa del trabajo. La parte buena es que estamos todos los días en casa de la gente".
"En cualquier momento te puede apetecer otro proyecto", dice Ana, que coincide con Arturo. "Pero el producto en el que estamos es muy intenso, tenemos mucha familia ahí, somos muy piña. Es un curro muy intenso, pero muy agradecido y priviliegiado".
Ana Garcés da vida a Jana en 'La Promesa'.
El boom de La Promesa también ha traspasado fronteras al emitirse en Max (antigua HBO) para el resto del mundo. "En un aeropuerto me paró una chica de Cuba que vivía en Miami y que veía la serie. Fue muy random", cuenta Ana, a la que también han llegado a escribir en filandés a través de redes sociales.
Y Arturo agrega: "Hay españoles en todas partes del mundo. En cualquier lugar siempre te encuentras a un español o española que, por cierto, nunca te llama por tu nombre, sino por tu personaje".
Los guiones de Cister
Por otra parte, ambos intérpretes comparten con BLUPER sus ansias por conocer el devenir de sus personajes a través de los guiones que escribe Cister. Y aún se siguen sorprendiendo. "Le suplicamos que nos adelante un poco. 'Un mes, por favor', le decimos. Todo el mundo tiene muchísimas ganas de saber qué va a pasar", señala la vallisoletana de 24 años.
Lógicamente, lo mismo ocurre con la gente de su entorno más cercano, que les pregunta por lo que ocurrirá en La Promesa. "Nos pasa todo el rato", dice Ana para admitir entre risas que tiene una "clausula de confidencialidad con mi madre". "Es que es mi madre, y necesito contárselo", se justifica. "Pero lo más bonito es no contar nada".
Xavi Look, Curro en 'La Promesa', y Ana Garcés.
Con estos datos, no es extraño que se les pregunte si, de alguna manera, sea la heredera de Amar es para siempre, una telenovela que estuvo en antena diez años. "¿Por qué no? No se sabe, pero sí creo que podría. Siempre que la audiencia lo permita", responde Ana.
"Nuestro secreto es la audiencia", apunta su compañero. "Cuando empezamos no sabíamos que acogida íbamos a tener, y gracias a los espectadores estamos donde estamos. "Seguirá habiendo Promesa hasta que la gente quiera. La audiencia manda", remata.