No lo tenía nada fácil el partido de vuelta entre Albert Rivera y Pablo Iglesias en Salvados para igualar el dato conseguido durante su primer cara a cara. Entonces, el espacio presentado y dirigido por Jordi Évole había batido su récord histórico de audiencia con un 25,2% de cuota de pantalla 5.214.000 espectadores.
Este domingo, el debate no sólo estuvo muy alejado del tono de aquel debate, sino también en audiencia. Los espectadores, cada día más cansados de la política en prime time otorgaron un 18,2% 3.237.000 espectadores. Es decir, siete puntos de share y 2 millones de espectadores menos.
El programa sí ayudó a que El Objetivo de Ana Pastor promediara un buen 11,6% de cuota de pantalla y 2,1 millones de espectadores con el análisis posterior del cara a cara.