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A una semana de que se entreguen los Oscar cualquier cosa puede pasar. Tres anuncios en las afueras y La forma del agua han mantenido un pulso en el que cada una se ha llevado la mitad de los premios. Las dos se han enfrentado a problemas, la primera su ausencia en la categoría de Mejor director, la segunda la demanda por plagio contra Guillermo del Toro. ¿Provocará esto que una tercera vía se imponga?, ¿hará historia Greta Gerwig en el año de las mujeres?

Respondemos a todas esas preguntas y analizamos las categorías más importantes de los premios de la Academia de Hollywood, pero también nos mojamos para decir quién debería ganar y por qué.

Mejor Película

Quién ganará

Este año se ha vivido un duelo emocionante. Tres anuncios en las afueras ha triunfado entre parte de la crítica, se llevó el Globo de Oro al Mejor drama, el BAFTA a la Mejor película y el premio al Mejor reparto del sindicato de actores. Motivos suficientes para ser la favorita, pero las nominaciones a los Oscar dejaron una sorpresa desagradable para Martin McDonagh, su ausencia en el quinteto finalista de Mejor director.

Sólo cuatro películas han logrado la victoria final sin estar nominadas en la otra categoría reina, así que la estadística se coloca del lado de Guillermo del Toro y La forma del agua, que además ha demostrado que en los gremios de Hollywood es la favorita -se ha llevado el de los productores y directores-.

Tres Anuncios en las Afueras

Quién debería ganar

Call me by your name es la joya del año y una de las películas más olvidadas por la Academia. Desde su presentación en Sundance de 2017, todo el mundo cayó rendido a las virtudes de un drama que habla del primer amor, del deseo y de la pasión de una forma sublime. La sensibilidad y erotismo que desprende el filme de Luca Guadagnino es un torbellino de emociones que comienza como una oda a la belleza clásica y acaba con una de las mejores escenas del cine reciente, ese plano fijo a la cara de Elio que es un resumen perfecto de toda una vida: la ilusión, el dolor, la incomprensión y el volver a levantarse.

Mejor director

Quién ganará

Guillermo del Toro. Sin la competencia de Martin McDonagh tiene el camino libre para convertirse en el tercer mexicano en levantar el Oscar. Su película es la más nominada, triunfó en Venecia, y ya tiene en su poder el premio del sindicato de directores. Una apuesta segura.

Quién debería ganar

Paul Thomas Anderson se merece el Oscar desde hace años, pero el virtuosismo que demuestra en El hilo invisible está un paso por encima de sus competidores. Su apuesta por convertir un romance clásico en una película enfermiza que muta en el terror gótico a golpe de la música de Jonny Greenwood es la obra de un maestro y un trabajo mucho más complejo que el de Del Toro.

Una película demasiado compleja y autoral que ya se puede dar por contenta con todas sus nominaciones, pero que debería verse recompensada, al menos, en esta categoría.

Chalamet y Armie Hammer en Call me by your name.

Mejor actor

Quién ganará

Una de las categorías más cantadas de la noche. Gary Oldman es el favorito desde que se anunció el proyecto de El instante más oscuro, en el que da vida a Winston Churchill. Uno de esos trabajos que se esconden en kilos de maquillaje (algo chanante), y que son más una imitación perfecta que un trabajo de composición actoral. Oldman se merece un Oscar, pero ha demostrado ser mucho mejor actor en otras películas como El topo.

Quién debería ganar

Timothée Chalamet es el descubrimiento del año. Hacía tiempo que un actor tan joven no sorprendía tanto con una interpretación tan compleja y tan madura como la que el realiza en Call me by your name. Su Elio tiene la frescura y la irreverencia de la adolescencia, pero todos los matices de una persona que descubre el deseo, su sexualidad y la pérdida en un verano. Su última escena es un prodigio interpretativo y sólo por ella se merecería el Oscar.

Mejor actriz

Quién ganará

Frances McDormand por hacer de Frances McDormand una vez más se llevará el Oscar. Un trabajo que borda y que le va como anillo al dedo, el de mujer borde y decidida, pero que ya hemos visto en numerosas ocasiones. Ya tiene uno por un papel similar, el de Fargo, y se llevará este segundo en una categoría con grandísimas interpretaciones.

Quién debería ganar

Con sólo 23 años la joven Saoirse Ronan ya acumula 3 nominaciones en tres papeles inolvidables. Su Lady Bird no sería nada sin el guion de Greta Gerwig, pero ella, con su aspecto frágil pero su personalidad, lo dota de presencia y aristas. Un papel que, como la película, corre el riesgo de pasar desapercibido por su aparente naturalidad, pero que esconde tantos matices que debería llevarse el premio.

Tráiler de Lady Bird

Mejor actor secundario

Quién ganará

Otro premio que parece que caerá para Tres anuncios en las afueras, en este caso para Sam Rockwell (aunque tener a otro actor del mismo filme nominado puede ir en su contra). Otro intérprete que siempre ha pasado desapercibido y que aquí se reivindica. Le hemos visto en mejores papeles, y aquí tiene el personaje más problemático del filme, el del policía racista que por arte y magia del guion de McDonagh se redime al final. Un caramelo de personaje por el que es el favorito.

Quién debería ganar

Dos actores veteranos en dos grandes interpretaciones como Christopher Plummer y Richard Jenkins se merecen más ese premio. El primero por Todo el dinero del mundo en un papel que hizo Kevin Spacey y que fue eliminado y rodado de nuevo por las acusaciones de abusos. Miedo da pensar lo que hubiera hecho Spacey lleno de maquillaje y sobreactuado en un papel que Plummer borda. Es capaz de parecer un abuelo tierno un minuto antes de ser el hombre más despiadado del mundo, corrompido por el poder del dinero.

Jenkins por su parte, llena de humanidad al amigo gay y solitario de la princesa muda de La forma del agua. Otro actor que merece un premio como el Oscar y que aquí demuestra que siempre está a la altura.

Mejor actriz secundaria

Quién ganará

Allison Janney ha ganado todos los premios previos y es la gran favorita en esta categoría por su despreciable madre en Yo, Tonya. Además es una de las actrices más queridas de la industria, una secundaria de lujo a la que en EEUU aman desde su inolvidable C.J. en El ala oeste de la casa blanca. Puntos a favor para una gran interpretación a la que le pesa el efectismo de la propia película. Otro personaje bombón que en manos de una buena intérprete se convierte en una bomba, pero mucho más obvio que otras composiciones más sutiles del quinteto de finalistas.

Quién debería ganar

Qué difícil es lo que hace Laurie Metcalf en Lady Bird. Cómo consigue que empaticemos y comprendamos a esa madre llena de contradicciones y amor a su hija. Una interpretación cargada de sensibilidad y que tiene un gran peso en el éxito del filme, ya que es en la relación entre madre e hija donde el filme de Gerwig se crece.

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