La crisis se cebo con el cine. Productoras, exhibidoras y distribuidoras vieron como la industria se iba a pique y cerraban un gran número de empresas. Esto provocó que incluso muchas provincias llegaran a quedarse sin salas. La destrucción de pantallas fue brutal, pero por fin y por primera vez en años se ha estabilizado. Según el Censo de Salas de Cine organizado por la Asociación para la Investigación de Medios de Comunicación la destrucción de locales ha tocado fondo y ha llegado a su fin en 2018.

Respecto al último censo se pierden sólo dos locales, por lo que la cifra se sitúa en 697, una disminución del 0,3%. En cuanto al número de salas también se mantiene estabñe respecto al año anterior, con una bajada de sólo el 0,5%. En 2018 se han creado 92 pantallas nuevas, pero se han destruido otras 108, por lo que el total es un descenso de 16.

Este dato significa que la destrucción ha parado, pero comparándolo con el del 2008 los descensos acumulados son significativos tanto en locales (-11,2%), como en pantallas (-12,4%) y en butacas (-16%). La situación previa a la crisis es una utopía que parece que nunca volverá a retomarse.

Este estudio también analiza la presencia de cines por provincias, algo que ha mejorado en los dos últimos años, ya que el número de municipios que cuenta con, al menos, una sala de cine es de 454, seis más que el año pasado y 17 más que el anterior. Un 62,4% de la población española reside en uno de estos municipios, lo que provoca que 1 de cada 3 españoles no tenga una sala en el lugar en el que vive.

Los cines también han cambiado su perfil, y mientras hace diez años las multisalas de innumerables pantallas eran la tónica dominante, en los últimos años la tendencia ha cambiado hacia la existencia de cines con menos pantallas y butacas. La media de butacas por sala es de 222, dos menos que en 2017; y cada local tiene un promedio de 5 salas.

En España existen aproximadamente 76 salas de cine por cada millón de habitantes, la misma cantidad que en el censor anterior, pero todavía 13 menos que hace diez años. Por comunidades autónomas, las que tienen más cines por ciudadano son La Rioja con 133, Navarra con 93 Y Comunidad Valenciana con 89. Las que peor ratio promedian son Ceuta y Melilla, con 47, Extremadura con 52 y Asturias con 63.

En términos absolutos las comunidades con más salas son Cataluña con 645, Andalucía con 562 y Madrid con 486. Entre las tres suman casi la mitad de todas las salas existentes en España. El ránking por provincias lo lideran Madrid, Barcelona y Valencia.

El informe muestra que la digitalización del campo de salas está casi completada, aunque algunos cines pequeños se hayan resistido a hacerla ya que el desembolso a realizar es tan grande que significaría su cierre. En nuestro país ya existen 3.469 salas con proyector digital, un 98,6% del total, con un incremento de 66 pantallas y 22% en cuatro años. Los cines que no cuentan con pantallas digitales son en su mayoría (un 96,4%) cines de sala única que aguantan gracias a las distribuidoras indies y un público muy fiel.

Este será el último informe que se realiza con el IVA al 21%, por lo que será importante ver si con la bajada del impuesto prometida por el gobierno se frena del todo el cierre de salas e incluso se abre algún local más, especialmente en las provincias donde no tienen ninguna.