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El Rey de la Noche
En el segundo capítulo de esta última temporada, durante la reunión para determinar la estrategia en la batalla definitiva, los cabecillas del bando de los vivos se preguntaban si el fuego podría acabar con el Rey de la Noche. Se ha demostrado que no, que solo el vidriagón y la agilidad de Arya —¡¿de dónde sale sin que ninguno de los caminantes blancos sea capaz de frenarla?!— podían convertir en pedazos la gran amenaza para Poniente. Ya no habrá mas resurrecciones multitudinarias; y por muchos aforismos que inunden la serie, sí, se puede derrotar a la muerte.
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Melisandre
En la noche más oscuras, llena de horrores y de muertos vivientes, el dios de la Luz ha sido el que más ayuda ha prestado a los vivos. Melisandre, su profeta, jugó un papel fundamental en la resolución de la batalla: primero, prendiendo (inútilmente) con fuego las espadas de los dothraki; luego, asegurando la retirada hasta las murallas de Invernalia convirtiendo la trinchera en llamas; y por último, con un crucial discurso a Arya —"¿Qué le decimos al dios de la Muerte?", "Hoy no"—. Todo ello antes de abandonar el castillo para entregarse a la muerte en la nieve, desprendiéndose de ese collar que la mantenía joven. La trama de Melisandre, tan enrevesada en otras entregas, encaja ahora con todas las piezas.
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Jorah Mormont
Qué mejor muerte para un caballero que en el campo de batalla protegiendo a su reina. La muerte de sir Jorah Mormont era una de las más predecibles en la batalla de Invernalia, más aún después de haber sobrevivido a todo tipo de heridas y enfermedades. Sucumbió con honor, salvando a Daenerys de las hordas de caminantes blancos.
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Theon Greyjoy
"Theon, eres un buen hombre". El perdón que le concede Bran al Greyjoy, quien le había protegido con determinación y coraje, era lo que buscaba en su regreso a Invernalia: sacrificarse por todas las traiciones que había cometido contra los Stark. Theon, en un último alarde de idealismo, carga de forma suicida y con su lanza contra el Rey de la Noche. Solo encuentra la muerte, pero se trata de un adiós emocionante y sentido, que seguramente haya sacado un buen puñado de lágrimas a los fans de 'Juego de Tronos'.
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Lyanna Mormont
La familia Mormont ha sido una de las grandes damnificadas de la batalla. La heroica y valiente Lyanna, uno de los personajes más queridos de la serie a pesar de contar con un protagonismo muy secundario, fue aplastada por un gigante muerto (¿Wun-Wun?), pero consiguió clavarle una daga en el ojo antes de emitir su último aliento. Un sacrificio que nos ha dejado el corazón helado. Gracias por momentos tan geniales.
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Beric Dondarrion
Tras morir y revivir casi una decena de veces, la espada de Beric Dondarrion se ha apagado definitivamente. El líder de la Hermandad sin Estandartes sacrificó su vida para salvar a Arya, amenazada por un séquito de muertos vivientes en los pasillos de Invernalia. Como bien le dijo Melisandre a la pequeña Stark, "el Señor lo resucitó con un propósito. Ahora ya ha servido a ese propósito". Allá se encontrará con Thoros de Myr...
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Los dothraki
El ataque suicida de los dothraki contra un objetivo que no alcanzaban a ver puede ser una de las peores cargas de caballería de la historia, a la altura de la de Faramir y los soldados de Gondor en 'El Señor de los Anillos' o la de los samuráis de Katsumoto y el capitán Nathan Algren en 'El último samurái'. Qué sentido podía tener eso... Eso sí, cómo se va apagando el fuego de las espadas de los dothraki en las distancias es una de las secuencias más escalofriantes del capítulo. Por cierto, ¿qué sería de Fantasma, el lobo de Jon Snow, que comandaba la ofensiva y no se volvió a saber nada de él?
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Edd Tollett
Después de sobrevivir a las escaramuzas contra los caminantes blancos más allá del Muro y a la caída de este, el hermano de la Guardia de la Noche Edd murió salvando a Samwell Tarly. Su guardia ha llegado a su fin —aunque por unos segundos sus ojos se tornasen azules...—.
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Viserion
Ahora sí, ya solo quedan dos dragones con vida. Viserion, la criatura a la que atravesó una lanza de hielo en la pasada temporada y el Rey de la Noche revivió, se extinguió con la muerte de su amo. Por el camino a punto estuvo de llevarse a alguno de sus hermanos y de incendiar toda Invernalia con sus llamaradas de fuego azul. Los otros dos dragones salieron con vida de la batalla —a ambos se les ve volando en el tráiler del próximo episodio— y ya preparan la garganta para carbonizar a Cersei.
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Gusano Gris
Espacio ya para los personajes que han sobrevivido a la batalla. Por Gusano Gris nadie daba un duro, la verdad, pero a expensas de la lucha final por el Trono de Hierro, podrá ver realizados sus planes de futuro lejos de Poniente con Missandei. No obstante, tuvo que sacrificar a muchos de sus Inmaculados por una victoria que parecía imposible. Ese momento en el que levanta la trinchera, empujando a sus hombres a una muerte segura para salvar al resto del ejército de los vivos, fue otro de los momentos más sobrecogedores del capítulo.
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Jon Snow
Cuando todo parece visto para sentencia, cuando Jon está rodeado por una multitud de caminantes blancos y su (segunda) muerte es inevitable, siempre hay alguien que le salva. En la batalla de los Bastardos fue la caballería del Valle de Arryn; más allá del Muro fueron Daenerys y su tío Ben Stark; en Invernalia, Drogon y su novia-tía le rescataron de un ejército de muertos que se levantaban por enésima vez. También su hermana Arya le libró de ser convertido a cenizas por el dragón zombie. ¿Cuántas vidas le quedan todavía a Jon Snow/Aegon Targaryen?
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El Perro
En 'Juego de Tronos' parece que hay personajes inmortales. El Perro, Gregor Clegane, es uno de ellos. Tuvo un momento de flaqueza durante la batalla, en el que veía imposible combatir a la muerte. Solo reaccionó cuando vio a Arya haciendo frente en solitario a una grave amenaza. También hay que reconocerle su mérito en la derrota de los muertos. Quien también logró salir con vida fue Tormund Matagigantes, otro que no se pierde una.
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Brienne de Tarth y Jaime Lannister
La cara de Jaime al contemplar al enemigo al que se enfrentaban fue un poema durante todo el capítulo. El matarreyes luchó al lado de Brienne, ya como caballera, y se protegieron mutuamente de los ataques alocados de los caminantes blancos. La gran pregunta es ahora determinar de qué lado estará el Lannister en la batalla por el trono de Hierro, si con Daenerys o con su hermana Cersei.
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Samwell Tarly
Sam fue el primer personaje que mató un caminante blanco, hace ya unas cuantas temporadas. En la batalla de Invernalia mostró su faceta más desconocida, la de un luchador aguerrido y correoso, lejos del asustadizo hermano de la Guardia de la Noche entregado al estudio de los libros. Eso sí, como se ve en la imagen, su vida corrió serio peligro; mucho tiene que agradecerle a su hermano de negro Edd.
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Sansa Stark y Tyrion Lannister
"Quizá deberíamos haber seguido casados", le dice Tyrion a Sansa en la cripta de Invernalia, donde los muertos de los Stark también revivieron. "Eres el mejor de todos", le responde ella. El pequeño diálogo entre ambos personajes fue sin duda uno de los momentos afectivos de un capítulo marcado por la sangre, la oscuridad y los cadáveres.
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Gendry
Entre los pocos que sobrevivieron se encuentra también Gendry, el bastardo de Robert Baratheon y el 'amigo' de Arya. A pesar de la envergadura de la batalla, los productores de 'Juego de Tronos' han preferido mantener a la mayoría de los personajes principales con vida. Pero todavía queda guerra por delante.
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Bran Stark
La muerte es sinónimo de olvido, y el gran objetivo de los caminantes blancos era acabar con Bran Stark, el Cuervo de Tres Ojos, que todo lo ve. El joven y el Rey de la Noche llegan a enfrentarse cara a cara en el bosque de Invernalia, pero sin intercambiar ninguna palabra, sin explicar nada. Esperemos que Bran, ahora que la gran amenaza ha finalizado, revele su verdadera función en el mundo de 'Juego de Tronos'. Y qué quiere decir cuando declara ese: "Me voy". ¿A dónde?
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Arya Stark
Es la gran heroína de 'Juego de Tronos', la encargada de acabar con el Rey de la Noche. Su entrenamiento en la Casa de Blanco y Negro estaba destinado a este momento, a surgir de la nada y clavarle un puñal al líder de los caminantes blancos. En el capítulo se ve a la Arya asesina, diestra con la lanza que le ha forjado Gendry, y a una niña presa del pánico. Ella es una humana, pero al mismo tiempo nadie. Y salva al Cuervo de los Tres Ojos, pero, sobre todo, a su hermano.
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