La escalada de tensiones entre EEUU e Irán también se coló en la gala de los Globos de Oro. Fue la siempre combativa Patricia Arquette, ganadora del galardón a Mejor actriz de reparto en una miniserie por su papel en The act, la encargada de denunciar las maniobras bélicas de Donald Trump que han empujado a su país "al borde de la guerra". En este sentido, la intérprete reclamó sobre el escenario el voto de todo el mundo para echar al magnate de la Casa Blanca.

"Estoy muy contenta de estar aquí y celebrar este premio, pero vamos a ver esta noche, cinco de enero de 2020, en los libros de Historia, como la de un país al borde de la guerra, a nuestro presidente amenazando por Twitter, a millones de personas sin saber si caerán bombas sobre sus cabezas. Como amo muchísimo a mis hijos, os pido que les deis un mundo mejor. Por favor, que todo el mundo tenga esto en cuenta y vote en consecuencia en 2020", reclamó Arquette.

La ceremonia de los Globos de Oro, celebrada en Los Ángeles este domingo, ha tenido lugar unos días después de que un dron del ejército estadounidense asesinase al poderoso general iraní Soleimani y con Trump aumentando el contingente de tropas en la zona. Una escalada de tensiones que algunos temen que pueda conducir a una nueva guerra.

Feminismo

El otro discurso más sobresaliente de la noche lo protagonizó Michelle Williams, premiada como Mejor actriz de una miniserie por Fosse/Verdon, quien instó a las mujeres estadounidenses a que voten pensando "en su propio interés". "Es lo que han hecho los hombres durante años y por eso el mundo se parece tanto a ellos", dijo la intérprete en un apasionado alegato feminista.

"No olvidéis que somos el grupo con derecho a voto más grande en este país. Hagamos que se parezca más a nosotras", añadió. Williams no solo se refirió, implícitamente, a las elecciones presidenciales de Estados Unidos de noviembre, sino que también destacó la importancia de seguir luchando por la igualdad entre mujeres y hombres.

"Me siento agradecida de vivir en un momento en nuestra sociedad en el que las opciones existen. Como mujeres y como chicas, hay cosas que pueden suceder a nuestros cuerpos que no son nuestras opciones", reflexionó.

La actriz dijo que siempre quiso vivir a su estilo, aunque algunas veces fuera de manera caótica y otras precisa y calculada. "No podría haber hecho esto sin haber usado el derecho a elegir de las mujeres. De elegir cuándo tener mis hijos y con quién", explicó. "Sé que mis decisiones quizá sean diferentes a las vuestras, pero gracias a Dios, o a quien reces, que vivimos en un país fundado en el principio de que soy libre para vivir según mi fe y para que vosotros podáis vivir según la vuestra", añadió.

Cambio climático

Muchos actores y actrices durante la gala, como por ejemplo la propia Patricia Arquette, Cate Blanchet o la presentadora Ellen DeGeneres, también se acordaron de los afectados por los gigantescos incendios que están devorando Australia. Sin embargo, en relación con este tema, las palabras más emotivas las pronunció (por boca ajena) Russell Crowe, Mejor actor en una miniserie por La voz más alta.

No se encontraba el mítico protagonista de Gladiator, nacido en Nueva Zelanda, en Los Ángeles, sino que está en Australia con su familia luchando contra el fuego. Su discurso lo leyó Jennifer Aniston en su lugar: "No nos confundamos: la tragedia de Australia se debe al cambio climático. Necesitamos actuar basándonos en la ciencia, mover nuestra fuerza de trabajo a energías renovables y respetar nuestro planeta como el único e increíble lugar que es".

También Joaquin Phoenix, vencedor como Mejor actor dramático por la película Joker, llamó la atención sobre la necesidad de proteger al planeta: "A veces tenemos que tomar la responsabilidad y hacer cambios y sacrificios en nuestras propias vidas. Espero que podamos hacer eso. No debemos tomar aviones privados a Palm Springs (...). Intentaré hacerlo mejor y espero que vosotros también", señaló.