El coronavirus no pudo con el Atlántida Film Fest. O al menos no del todo. A pesar de que muchos festivales tuvieron que mudarse a una versión online, el certamen organizado por Filmin, pudo mantener su doble vertiente y realizar su parte física, que se celebró en Palma (Mallorca) y seguir realizando su parte online, donde se puede todavía disfrutar su programación hasta el 27 de agosto.

Una edición que premió a Stephen Frears, pero que todavía no había anunciado su película de 'clausura'. La elegida será Isaac, la ópera prima de Ángeles Hernández y David Matamoros, quienes dan un paso más en su carrera profesional y se lanzan a dirigir un largometraje tras más de 12 años colaborando juntos en labores de producción dentro de Zentropa, la productora de Lars Von Trier. Un título que se podrá ver desde Filmin desde el 23 de agosto hasta el 27 del mismo mes.

Un filme que reflexiona sobre las consecuencias de la maternidad subrrogada, un tema de candente actualidad, y que además tiene un componente solidario, ya que la recaduación de la película durante la emisión en el Atlàntida Film Fest será donada a la organización #AAA (ActúaAyudaAlimenta), una iniciativa sin ánimo de lucro que persigue paliar los efectos del covid-19 en el sector cultural.

La película, basada en la obra teatral El día que nació Isaac, de Antonio Hernández Centeno, quien también firma el guión del largometraje junto a Hernández y Matamoros, está protagonizada por Iván Sánchez (Hospital Central), Erika Bleda (La llamada), Pepe Ocio (El Reino) y Maria Ribera (nominada al premio Gaudí por Les Distàncies). Cuenta la historia de Nacho y Denis, dos amigos que se reencuentran casualmente después de veinte años. Nacho está casado con Marta y son un matrimonio burgués perfecto, con un excelente trabajo y un buen status social, cuya ambición es quedarse embarazados. Por el contrario, Denis y su pareja Carmen viven al día mientras ahorran para poder abrir un restaurante gourmet. Nacho les propone que sean su "vientre de alquiler" a cambio del dinero que necesitan. Pero el trueque propuesto les obligará a descubrirse a ellos mismos a riesgo de perder la estabilidad aparente que ahora tienen.