El día que Claudia Cardinale y Brigitte Bardot revolucionaron la España del franquismo
La película Las Petroleras se rodó entre la provincia de Burgos y la Comunidad de Madrid, convirtiéndo esta producción en el acontecimiento con más espectación del momento.
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Se cumplen 50 años del rodaje en Burgos y Madrid de la película Las Petroleras, protagonizada por Brigitte Bardot y Claudia Cardinale. Un hecho que en su día fue el acontecimiento del año, y es que no era habitual contar con dos estrellas internacionales de su talla en tierras españolas. Durante los dos meses de grabación de la producción, ambas actrices revolucionaron la provincia burgalesa, atrayendo la atención de sus habitantes y de la prensa nacional que se arremolinaba alrededor del set.
Corría el verano de 1971 cuando estas dos actrices pisaron suelo español para el rodaje de Las Petroleras, un wéstern paródico dirigido por Christian-Jaque que reflejaba a golpe de celuloide la historia de Eduardo Manzanos Brochero. En ella, varias hermanas marginadas de la ley del viejo oeste se trasladan y tratan de establecerse y entablar relaciones positivas con la familia vecina, compuesta de varios hermanos. Bardot y Cardinale son las que lideran estos dos clanes familiares, y el enfrentamiento entre ambas para conseguir unas tierras en venta será el hilo conductor de la trama.
Burgos se convirtió así en el lejano oeste, un escenario que junto a Madrid acogió esta pintoresca historia que también aborda los conflictos en torno a la explotación del petróleo. La película fue todo un éxito en Francia, y en nuestro país también alcanzó cifras elevadas: 1.608.946 espectadores de la época fueron a ver Las Petroleras en los cines españoles.
En una fecha tan redonda, las asociaciones culturales Sad Hill y Colmenar Viejo, Tierra de Cine, recuerdan aquella mítica filmación iniciada a finales de junio, y continuada en agosto y septiembre de 1971. Una coproducción entre Francia, Italia, Inglaterra y España que dirigió su mirada a estos exteriores por el gran parecido que guradaban con los de Arizona y Nuevo México.
Mujeres al frente
Dentro de la tradición del eurowestern cómico esta película rompía bastantes barreras de género, ya que no era para nada habitual que estas cintas fueran protagonizadas por dos mujeres. Además, con unos personajes potentes y empoderados, que no dudaban en jugar con el humor y el erotismo en una mezcla explosiva para la época.
Las que por aquel entonces eran dos sex-symbol y mitos eróticos del cine europeo, se convirtieron en mujeres osadas y valientes que rompen estigmas en la gran pantalla: mujeres que luchan cuerpo a cuerpo, que beben vino tinto en la taberna, que juegan con los hombres para conseguir sus objetivos.
Como anécdota, algunas escenas de desnudos que aparecen en el film no lograron superar el filtro de la censura de la España del franquismo. Escotes pronunciados, mujeres sensuales empuñando armas y rifles, y más que bofetadas y patadas en la pelea final entre las protagonistas sí que pudieron emitirse, aunque con alguna reserva que otra.
La actriz francesa Brigitte Bardot lidera el clan de mujeres bandidas, especializadas en al asalto de trenes; y Claudia Cardinale el grupo de hermanos holgazanes y torpes, que serán secuestrados por las chicas de Bardot en una mezcla de coqueteo y armas. El objetivo de ambas es hacerse con el rancho en venta que esconde una gran riqueza petrolífera.
Oeste made in Spain
Las escenas ferroviarias se rodaron en las instalaciones de la desaparecida línea Santander-Mediterráneo, en la estación de Salas de los Infantes, y en los tramos de vía de Castrillo de la Reina, Cabezón de la Sierra y Rabanera del Pinar. Aunque el rodaje en decorados interiores y exteriores se realizó en Madrid, Daganzo y en la Dehesa de Navalvillar de Colmenar Viejo, fueron los de Burgos los que más atención mediática tuvieron.
Durante el rodaje, los actores de la película aprovecharon su estancia en Burgos para visitar la ciudad, la catedral e incluso pasear por el Paseo del Espolón, estampas que la prensa local capturaba y de la que hablaron durante semanas y semanas; además de destacar en varias ocasiones que Bardot tenía una actitud muy antipática y arrogante tanto con la prensa como con los fans que se acercaban a cotillear.
Con actores como Michael J. Pollard, Patty Shepard o Micheline Presle, y hasta un cameo de José Luis López Vázquez y con escenarios madrileños que también se pueden encontrar en grandes clásicos como La muerte tenía un precio (1965) o El bueno, el feo y el malo (1966), ambas de Sergio Leone.
A través de la Burgos Film Commission se han organizado actos de recuerdo, como una visita guiada a los lugares ferroviarios de rodaje, o la proyección de la película con un coloquio posterior con el cineasta Víctor Matellano y con Diego Montero.
Además, los más fans de la película podrá acudir a la exposición “Madrid, Territorio Far West”, que recoge bocetos originales de la película y que está actualmente girando por diferentes localidades madrileñas para homenajear a Las Petroleras. Todo un homenaje para recordar los 50 años de esta película tan peculiar.