Los fans de Stranger Things, una de las series más exitosas de todos los tiempos de Netflix, están de enhorabuena. La casa de la familia Byers ha colgado su cartel de 'Se vende' y lo ha hecho con una cifra ridícula teniendo en cuenta su fama y todas las tramas que tienen lugar dentro de ella.
Esta construcción de una planta es el lugar donde viven Joyce (papel que interpreta la actriz Winona Ryder) junto a sus dos hijos Will y Jonathan, a las afueras de Hawkins, pueblo ficticio donde se desarrolla la serie. Se convierte en sí misma en protagonista en muchos de los capítulos. Es tal la popularidad que ha adquirido a raíz de la serie que se ha convertido en un punto de peregrinaje para los fanáticos de Stranger Things.
Se encuentra ubicada en la ciudad de Fayetteville, en Georgia, y la vivienda data del 1900. Sus dueños se han visto obligados a colocar unas vallas protectoras frente a la casa debido a la cantidad de curiosos que se acercan hasta el popular lugar.
Vista aérea de la propiedad.
Ahora está a la venta por 300.000 dólares (312.000 euros) a través de EXP Realty, y según publica TMZ, ya habría un comprador interesado. Si bien es cierto que necesita una reforma exhaustiva es una oportunidad de inversión. De hecho, entre las razones de su venta se encuentra que sus dueños (siete hermanos) no tienen capacidad económica para poder ponerla a punto. Se calcula que las reparaciones que tienen que llevarse a cabo en la residencia de más de 100 años costarían entre 50.000 y 100.000 dólares.
Su localización en una especie de rancho de 24.000 metros cuadrados convierte la propiedad en un atractivo. Cuenta con casi 200 metros cuadrados de planta distribuida en tres dormitorios y dos baños.
Parece ser que el comprador no quiere la casa para vivir en ella. El destino final de la vivienda sería convertirla en un Airbnb y sacarle rentabilidad. Pero las intenciones del inversor van mucho más allá porque no solo quiere rehabilitar la casa. También quiere recrear Hawkins con sus lugares más emblemáticos.
La casa cuenta con tres dormitorios y dos baños.
La reforma pretende convertir la casa en una copia exacta de como aparece en la ficción. Algunas fotos del interior de la casa muestran la icónica pared en la que Joyce Byers usa unas luces de Navidad y las letras del alfabeto para comunicarse con su hijo Will en la primera temporada.
En Tik Tok, el portal inmobiliario encargado de su venta, se ha publicado el anuncio de la casa al ritmo de la canción Running Up That Hill de Kate Bush, tema protagonista de la cuarta temporada de Stranger Things.
Luces de la casa de los Bayers.