Netflix ha presentado su cuenta de resultados en la primera junta de accionistas desde la salida de Reed Hastings como codirector ejecutivo. Tras un año de crisis, en el que la compañía perdió suscriptores por primera vez, 2023 parece ser un año de recuperación. En el primer trimestre de 2023 ha sumado 1.75 millones de abonados, lo que eleva el número total global a 232.5 millones.
Netflix ingresó 8.160 millones de dólares durante los primeros meses de 2023 y espera alcanzar los 8.240 millones en el segundo trimestre. Con estos datos en la mano, Ted Sarandos, codirector ejecutivo de Netflix, ha confirmado que la cifra de gasto en contenidos para 2024 será de unos 17.000 millones de dólares. Esta inversión se mantiene estable respecto a la de 2023.
"Dijimos que nos mantendríamos en aproximadamente 17.000 millones de dólares de media en el periodo de 2022 a 2024", apuntó el director financiero Spence Neumann respondiendo a una pregunta de Jessica Reif Ehrlich, analista de medios de Bank of America. "A medida que reaceleramos los ingresos, habrá oportunidades de negocio para aumentar esa previsión", afirmó.
Gasto de Netflix entre 2016 y 2022 (en miles de millones de dólares)
El gasto en contenidos de Netflix en contenido cayó en picado en 2020, cuando la pandemia de COVID frenó las producciones en todo el mundo, llegando a 11.800 millones de dólares ese año (frente a 13.900 millones de dólares en 2019). Pero aparte de eso, su inversión ha crecido significativamente cada dos años durante la última década.
Estas sumas se han estabilizado a medida que la empresa ha revaluado sus operaciones y tras los cambios en el mercado que se han producido en los últimos años con la entrada de nuevos competidores. Netflix sigue gastando una fortuna en contenidos, pero se ha impuesto un tope entre 2022 y 2024, lo que deja claro que los días de gasto desenfrenado en programación han quedado atrás.
El año pasado, el streamer pagó 16.840 millones de dólares por contenidos, un 4,9% menos que en 2021, cuando desembolsó 17.700 millones de dólares. Junto con medidas como la reducción de personal, la empresa también se ha embarcado en la búsqueda de nuevas iniciativas para generar ingresos, como la publicidad o el cobro de extras a sus abonados por compartir contraseñas.
Estrategia cinematográfica
Otra de las dudas para este año, era si Netflix tiene planeado cambiar su estrategia cinematográfica ahora que sus rivales en la industria del streaming, como Amazon Prime Video y Apple TV+, están apostando más por la exhibición en salas.
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"La división de cine va muy bien", respondió Sarandos. Las películas de Netflix que ganaron premios Oscar este año, entre ellas Sin novedad en el frente fueron "fueron muy, muy populares entre los fans", añadió, "nuestro principal objetivo es estrenar películas que gusten y se vean.
"Estamos muy contentos con la inversión que hacemos en películas, pero llevar a la gente a las salas de cine no es nuestro negocio. Creamos la demanda y la dirigimos a nuestro catálogo de suscripción", señaló Sarandos.
"Es tentador comparar los servicios en el ámbito cinematográfico", apunta Sarandos, "pero aquí el tamaño importa, los otros servicios de streaming no tienen nuestra escala, la base de suscriptores ni la base de ingresos para sostener una ventana única que nosotros podemos sí sostener, incluso con películas de gran presupuesto".