Netflix: la serie documental de investigación de crímenes famosos que es la 'Ley y Orden' de la vida real

Policías de verdad, crímenes de verdad. Cinco episodios. Cinco crímenes. El mismo grupo de inspectores y fiscales repasan los casos. Esa es la sinopsis oficial de Homicidio Nueva York, la serie documental de Netflix sobre casos célebres de asesinatos contados por la gente que mejor los conoce: los inspectores y fiscales que los resolvieron.

Producida por Dick Wolf, creador de Ley y Orden, hace aquí la versión true crime de su longeva y exitosa franquicia, repasando casos famosos con el mismo grupo de inspectores y fiscales, pero con la diferencia de que cada giro y revelación son reales. 

Esta temporada está centrada en Nueva York (hay una segunda en marcha en Los Ángeles) y presenta cinco historias diferentes e incluye entrevistas con la policía de Nueva York, así como con supervivientes, amigos y familiares de las víctimas. 

"En Nueva York, los detectives de homicidios se dividen entre el norte y el sur de Manhattan", explica a Netflix el productor ejecutivo Adam Kassen. "La policía de Nueva York es enorme. Puedes trabajar en ese departamento y no conocer a nadie durante años. Toda la gente de la serie se conoce entre sí, o bien han trabajado juntos de forma informal o han estado conectados de algún modo. Y eso fue con lo que empezamos, un grupo de gente que estaba conectada, que se preocupaba por sus casos".

"Puedes leer lo que pasó en Wikipedia, pero ahí no tienes el lado humano de la historia", dijo la productora ejecutiva Jane Lipsitz a Netflix. "No tienes el contexto de las familias y amigos de las víctimas. Eso, obviamente, es una parte muy importante, y realmente crea una cierta conexión emocional para el público".

La primera temporada: Nueva York

Episodio 1: 'La masacre de Carnegie Deli'

En 2001, las autoridades son llamadas a un apartamento situado justo encima del Carnegie Deli, un restaurante histórico popular entre los turistas en el distrito de los teatros de Manhattan. Cinco víctimas han sido tiroteadas y cuatro de ellas son encontradas con ataduras en las muñecas y los tobillos. El tiroteo se produjo en el apartamento de Jennifer Stahl, bailarina de fondo en la película Dirty Dancing.

Episodio 2: 'Central Park Slaying'

En mitad de la noche, el cuerpo de Michael McMorrows aparece flotando en el lago en medio de Central Park. A la mañana siguiente, cuando Rob Mooney, detective de homicidios de la policía de Nueva York, llega al lugar de los hechos, la prensa ya se ha agolpado y la presión es enorme para averiguar quién es el responsable del espantoso asesinato. Cuando Daphne Abdela, una adolescente de la zona, dice a la policía que su novio mató a la víctima, su versión acaba con la detención de ambos. 

Episodio 3: 'Desaparecida en Wall Street'

Eridania Rodríguez es una mujer de 46 años que trabaja en el turno de noche como limpiadora en el distrito financiero de Manhattan. Durante el verano de 2009, Rodríguez llega para empezar su turno y aparentemente desaparece. Cuando una compañera de trabajo se pone en contacto con su familia para ver si ha vuelto a casa, ésta corre frenéticamente al centro de la ciudad para ver si pueden encontrarla, pero es en vano. Cuando llega la policía de Nueva York, descubren que, según todos los indicios, Rodríguez nunca salió del edificio. La policía registra el edificio y encuentra el cadáver de Rodríguez en un conducto de ventilación. 

Episodio 4: 'Midtown Slasher'

Cuando Howard Pilmar, propietario de una empresa de material de oficina en el centro de Manhattan, aparece muerto a puñaladas en 1996, la policía empieza a sospechar que fueron miembros de la propia familia quienes conspiraron para matarlo. 

Episodio 5: 'Asesino en serie de East Harlem'

El descubrimiento de una víctima femenina desconocida en la escalera de un edificio de East Harlem lleva a la policía de Nueva York a reconstruir una serie de casos relacionados en todo el barrio a lo largo de varios años. Un violador y asesino en serie tiene como objetivo a mujeres jóvenes negras y latinas, y cuanto más tarda la policía en localizarlo, más en peligro queda una comunidad.