La inquietante historia real tras 'Mi reno de peluche', la comedia negra de Netflix de la que todos hablan
El cómico Richard Gadd ha sorprendido al público con el estreno de una serie basada en sus propias vivencias.
Entre todos los estrenos destacados que han llegado a Netflix en las últimas semanas, una de las grandes sorpresas que más han llamado la atención de los espectadores ha sido Mi reno de peluche. Se trata de una serie británica que sin apenas promoción ha logrado conquistar y convencer a la audiencia, que no ha dejado de comentarla desde que aterrizó el pasado jueves en la plataforma.
Al contrario de lo que pueda parecer por su título, Mi reno de peluche es en realidad una serie con trasfondo realmente oscuro e inquietante que, además, está basada en hechos reales.
Todo comienza con la versión ficticia de su creador y actor protagonista Richard Gadd, que en la serie adquiere el nombre de Donny Dunn. Un día conoce a una mujer en apuros en el pub donde trabaja y cuando decide tener un gesto amable con ella, acaba desencadenando lo que será el comienzo de una pesadilla.
Lo que comienza como una broma y un acto de generosidad acabará siendo algo mucho más siniestro, porque Martha lo interpretará como una especie de vía libre para empezar a acosarle en la vida real y a través de las redes sociales.
Sin embargo, lo más inquietante de esta serie y la historia que narra es que gran parte de la ficción está basada en hechos reales. Gadd también pasó años lidiando con una acosadora que se presentaba en su lugar de trabajo, en sus shows de comedia e incluso delante de su casa, todo bajo el pretexto de una amistad y, a los ojos de ella, algo más.
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A lo largo de varios años, la acosadora envió a Gadd un total de 41.071 correos electrónicos, 350 horas de mensajes de voz, 744 tweets, 46 mensajes de Facebook y 106 páginas en cartas, además de pastillas para dormir, un gorro de lana, calzoncillos nuevos y un reno de peluche, porque ese era el apodo con el que se refería a él.
Y a pesar de que traspasara todos los límites, la policía tardó años en actuar, porque cada uno de estos comportamientos entraba dentro de los límites de la legalidad.
Basado en hechos reales
Cinco años antes de que Richard Gadd acabara convirtiendo Mi reno de peluche en una serie, el cómico comentó en una entrevista cómo terminó haciendo de su historia una ficción para Netflix. Y es que antes de que se estrenase, el cómico ganó el premio de Comedia de Edimburgo por otra producción profundamente personal titulada Monkey See Monkey Do, en la que cambió su habitual estilo del humor por una sorprendente confesión de su experiencia como víctima de agresión sexual.
Este período en la vida de Gadd es anterior a la época en la que fue acosado por la persona a quien hace referencia llamándola "Martha", pero el episodio cuatro de la serie de Netflix nos remite a esa época en detalle, porque el trauma que vivió está profundamente conectado con la forma en la que trató a Martha.
"Esa fue la peor parte", expresó en la entrevista con The Guardian en 2019. "Me sentí como si hubiera eliminado los demonios de una persona que me había causado tanto dolor, solo para que ella [su acosadora] pudiera ocupar un lugar central. Era algo terriblemente irónico".
El acoso de Martha se intensificó apenas unas semanas después de que ganase el premio en 2016, marcando una época en la que deberían haber perdominado la alegría y la celebración. Sin embargo, Gadd cuenta que también se sintió culpable en ese momento, algo que también se muestra en la serie de Netflix.
"Hice muchas cosas mal y empeoré la situación", expresó el cómico. "No era una persona perfecta, así que no tiene sentido decir que lo era. Y sé que mientras hago mis sketches o mis proyectos la gente piensa que no soy una buena persona, lo que hace que sea difícil llevarlas a cabo".
Las diferencias con la realidad
En relación a los límites entre realidad y ficción de Mi reno de peluche, Gadd ha contado también que algunos aspectos de la historia tampoco lo pintan de manera favorable y que aunque "la serie es ligeramente ficticia", "el esqueleto de la historia es absolutamente verídico".
Los mayores cambios realizados en realidad surgieron de los esfuerzos por hacer que la historia fuera más accesible en lugar de más agradable: "La sensación que se siente cuando te acosan está entre el tedio y una frustración implacables. No quería que el público sintiera eso".
Después, hizo referencia a la manera en la que la policía maniobró en estas circunstancias. "Me regañaban por acosar a la policía porque me estaban acosando", expresaba Gadd, explicando que le sugirieron que, de alguna forma, hiciera su trabajo por ellos examinando las horas y horas de los mensajes de voz de Martha con la esperanza de que ella llegara a decir algo incriminatorio que pudiera usarse contra ella.
El desenlace
Sin entrar en detalles sobre el final de la serie, en otra de sus declaraciones, Gadd volvió a cuestionar su propia culpabilidad en lo ocurrido. "¿Dónde terminaron mis malas acciones y las de ella? ¿Cuándo empezó a visitarme? ¿Cuándo me atacó? Ciertamente lo incité antes de darme cuenta de que era tan peligrosa como era. A veces me comportaba como un imbécil", recordó.
"No puedo enfatizar lo suficiente lo víctima que es ella en todo esto", continuó diciendo Gadd. "Cuando pensamos en acosadores, siempre pensamos en películas como Misery y Atracción fatal, donde el acosador es una figura monstruosa en la noche en un callejón. Pero normalmente, es una relación anterior o alguien que conoces o un comapañero de trabajo. El acoso es una especie de trastorno mental. Habría sido un error pintarla como un monstruo, porque no se encuentra bien y el sistema le ha fallado".
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Sin embargo, aunque el sistema le fallara a Martha, también le falló a Gadd, que quiso compartir su historia para intentar provocar el cambio y ayudar a otros que están pasando por algo parecido.
"Las leyes que rodean el acoso y el abuso son muy estúpidas porque buscan el blanco y el negro, el bien y el mal, y no es así como funciona", contaba Gadd. "Podría intimidarte presentándome en tu lugar de trabajo todos los días y mirarte por la ventana. Puede que te sientas muy incómodo con eso, pero a menos que puedas demostrar que hay algún tipo de amenaza física, él puede hacer lo que quiera. Eso realmente está poniendo en peligro tu vida y es una locura".
El cómico y creador de la serie culpa "a la falta de financiación, de formación, de comprensión y de apoyo a las víctimas", no tanto a la propia policía. Para él, se necesita un "cambio fundamental y masivo en el sistema".
Gadd también ha reflexionado recientemente sobre el impacto que ha tenido en él volver a recordar todo esto en 2024. "Mentiría si dijera que no he vuelto exactamente a donde estaba hace tantos años. Temiendo lo peor. Rezando por lo mejor. Por eso espero que, entre todo lo desordenado y complicado, lleguen a la gente los temas que trata Mi reno de peluche".