Las series, y eso es indiscutible, cada vez se visten mejor. Las ficciones-pasarela como fueron Sexo en Nueva York y Gossip Girl han dejado como herencia una nueva y creativa obsesión por el vestuario. En esta competición fashionista, para inaugurar mis colaboraciones con este portal, me pregunto: ¿quién viste mejor a su protagonista?

Evidentemente hay personajes que no permiten desarrollar una forma de vestir estilosa bien por su situación, encarceladas como Piper en Orange is the new black, o porque se pasan el día con el uniforme de camarera como las chicas de 2 Broke Girls. Pero hay otras cuya personalidad y entorno exigen un vestuario que no pase desapercibido, que nos demuestre quién es ella y por qué nos tiene enganchados semana a semana. A ellas y a los responsables de sus armarios examino y valoro en este artículo.

10º Katherine Beckett (Castle)

Luke Reichle lleva siete temporadas cumpliendo con el objetivo de vestir a la inspectora más astuta de Nueva York. Kate Beckett se ha convertido en la reina de la chaqueta de cuero y la gabardina, entre sus marcas fetiche están Burberry, Andrew Marc, O’2nd, Current Elliott, IRO y Hugo Boss.  

Además de su streetsyle habitual, siempre cómodo en apariencia aunque luciendo tacones, su momento más especial ha sido el de elegir traje de novia. El primero con el que la vimos fue una creación del diseñador de la serie, pero finalmente optó por el que fue el vestido de su madre, que resultó ser un diseño de Alberta Ferretti. Ojalá todas las madres tuvieran esos vestidos guardados en el armario esperando ser rescatados.

Caroline McCall entiende a la perfección que su trabajo en Downton Abbey tiene que ilustrar los cambios en la época con las prendas de los personajes sin llegar a distraer de las interpretaciones. Para ella lo que hace el vestuario es añadir y llevar al espectador a ese mundo que recrea la serie. Los premios avalan su labor vistiendo a la serie británica, un Bafta, un Emmy y dos Costume Designers Guild Awards.

Vionnet, Chanel, Lanvin, Poiret, Edward Molyneux y las ilustraciones de George Barbier son parte de la inspiración para la nueva temporada en Downton Abbey, que pese a basarse en la estética de la primera mitad del siglo XX intenta que la audiencia moderna lo encuentre atractivo.

8º Las chicas de Velvet

Helena Sanchís tiene un doble reto. Vestir una serie coral de los años 50, pero además una que tiene como trasfondo el funcionamiento de unas galerías de alta costura y su taller. Para salir airosa recurre a los genios de la época para inspirarse: Balenciaga, el recientemente desaparecido Pertegaz y los franceses Dior e Yves Saint Laurent. También hay vestidos y complementos comprados en establecimientos franceses, londinenses, en el Rastro o prestados por coleccionistas.

Elegir solo uno de los personajes sería renunciar al glamour que desprenden todas, incluyendo a Ana (Paula Echeverría) pese a ser una de las chicas de "abajo". Los movimientos a lo Audrey Hepburn de Cristina (Manuela Velasco) o las artes de femme fatale de Patricia (Miriam Giovanelli) se visten desde el interior y es que el gusto por el detalle de la productora Bambú hace que su vestuario sea perfeccionista hasta el extremo.

El emblemático vestido rojo que luce Ana, la atrevida colección de De la Riva y el traje de novia del final de la primera temporada (muy Grace Kelly-Kate Middleton) han sido algunos de los looks más celebrados de la serie que afronta con fuerza la segunda oportunidad que le ha brindado la audiencia.

7º Zoe Hart (Doctora en Alabama)

La vecina es una fashion victim. Cameron Dale, la diseñadora de vestuario, asegura que el estilo de Rachel Bilson inspira el vestuario de su personaje en Hart of Dixie. Zoe Hart, doctora neoyorkina, es fiel a la moda de la Gran Manzana y se la lleva hasta su nueva vida sureña. El estilo moderno de Zoe se compone con marcas como Maje, Sandro, J. Brand, Helmut Lang y Nordstrom, entre otras. 

Ver la serie atendiendo al vestuario de Zoe es igual que navegar por los blogs de streetstyle, es decir, dar un paseo por las tendencias y eso lo convierte en un verdadero reclamo para las más fashionistas. El trabajo de Dale puede resultar más complicado porque ha de adaptar de forma instantánea las modas actuales al armario de su personaje. Pasar de los pitillos a los pantalones anchos, abrazar el imperio de los shorts y los cropped tops… Zoe cambia su vestuario como lo hacemos nosotras, y se advierte cuando demuestra que hay días que se levanta cañera y pilla la chaqueta de cuero o las ocasiones en las que opta por un vestido más femenino o una diadema de niña buena.

En general, la ficción española aún da sus primeros pasos hacia una verdadera preocupación por el vestuario, son las series históricas las que dedican mayor esfuerzo a este aspecto de la producción por una cuestión evidente, no debe haber errores ni incongruencias y necesitan que los actores parezcan creíbles y se crean su propio papel. El vestuario de Isabel ocupa el sexto puesto de este ranking por méritos propios, de hecho, las prendas que han lucido los intérpretes de la serie son actualmente expuestas en museos y centros culturales de toda España.

Los trajes diseñados por Pepe Reyes que luce Michelle Jenner han llegado a pesar 30 kilos, pocos menos de lo que pesaban en realidad, con el objetivo de ayudar a la movilidad de la actriz. Una docena de asesores trabajan con Reyes para buscar técnicas y tejidos antiguos y han llegado hasta a reconvertir colchas y alfombras en prendas de la realeza. Este vestuario obtuvo el Premio Iris 2013 de la Academia de las Ciencias y las Artes de Televisión (ATV). 

5º Jessica Day (New Girl)

Hay dos tipos de personas en el planeta Tierra: los que odian y los que aman a Zooey Deschanel. Para bien o para mal, yo soy de las que la aman. New Girl tiene la capacidad de robarme carcajadas cuando menos lo espero y Jess me enamoró desde el primer minuto del piloto. Parte de lo que la convierte en un personaje redondo es su vestuario, diseñado por la mítica Debra McGuire (sí, la que vistió durante 10 perfectas temporadas a los protagonistas de Friends).

La ropa y los zapatos de Jess reflejan lo divertida y excéntrica que es, con una paleta de colores infinita y llamativos estampados que dan forma a ese estilo “girlie” que necesita millones de vestidos de aire vintage,- comprados o diseñados para ella-, cuellos de bebé, bailarinas y una colección interminable de pijamas. Entre sus marcas preferidas se encuentran J. Crew, Kate Spade, Alice+Olivia, Dear Creatures, French Connection y Tory Burch. La actriz, que viste en muchas ocasiones con el mismo estilo que su personaje, ha diseñado para Tommy Hilfiger una colección cápsula que vistió en el último episodio de la tercera temporada. Si no es porque ya se habían comercializado las prendas, no habríamos podido notar la diferencia: Zooey y Jess visten igual y a veces me sorprendo preguntándome ¿serán la misma persona?

4º Claire Underwood (House of Cards)

Claire Underwood tiene un estilazo que pocas no desearían tener, pero que para conseguir un resultado tan abrumador es imposible sin tener el físico de Robin Wright. Ella se permite el lujo de repetir looks, como hacen ahora las reinas y las duquesas, y se ha convertido, junto a su frialdad, en el máximo exponente televisivo del menos es más. Algunas de las claves son el protagonismo a su (acertado) corte de pelo, la ausencia de joyas o complementos -con la excepción de gafas de pasta, pequeños pendientes y algún reloj-, nada de estridencias, ni estampados. Muy Vicky Beckham -la actual, no la Spice, claro está-. La elegancia para Claire es una buena camisa blanca o un favorecedor vestido negro, un evidente toque Carolina Herrera que la hace irresistiblemente interesante. Algo que unido a los guiones… OMG. No cabe duda de que sabe utilizar la moda como arma política.

En la primera temporada el diseñador de vestuario de House of Cards fue Tom Broecker, que le dio al personaje de Claire un armario lleno de Narciso Rodriguez, Prada y Ralph Lauren, Theory, Burberry, Banana Republic, Armani, Calvin Klein, Prada, Zac Posen,… Con la llegada de la estilista Gersha Phillips y más tarde Johanna Argan, el reto era escalar en el vestuario de Claire como lo hacía su vida política convertida en segunda dama de EEUU. Rania de Jordania, Jackie O. y la jequesa de Qatar fueron revisitadas para crear un nuevo look que siguiera despertando el interés de las fans. Y ahí entró Dior.

Empate 2º y 3º puesto: Emily Thorne  y Victoria Grayson (Revenge)

La moda de las mujeres vengativas de los Hamptons es aspiracional, alejada del bolsillo de la mayoría pero, definitivamente, con un hueco en nuestros sueños. El título de serie haute couture es suyo por evidentes méritos, no solos sus divas visten con clase, la perfección estilística define también al resto de personajes.

Jill Ohannesson ha sabido enfrentar el estilo de la vengadora Emily, asidua a la moda americana, contra el de Victoria, cuya mayoría de diseñadores son europeos. La sensualidad y exuberancia de Victoria se enfrentan al carácter más elegante y limpio de Emily. Si entras en su mundo tienes que elegir, o eres del team Emily o del team Victoria, y su estilo –como extensión de su personalidad- es clave para decidirte. En ese vestuario, que debe tener guarda de seguridad propio, cuelgan prendas de Michael Kors, Carolina Herrera, Alice+Olivia, Halston Heritage, Pamella Roland, J. Mendel, y Roland Mouret para Emily. Por otro lado, Versace, Gucci, Giambattista Valli, Herve Leger, Roberto Cavalli y Dolce&Gabbana para Victoria.

1º Olivia Pope (Scandal)

Lyn Paolo imagina a su Olivia con elegantes trajes de chaqueta para el trabajo y vestidos de fiesta de infarto cuando se requiere su presencia en un acto. El punto fuerte del vestidor de esta gladiadora de la moda son los abrigos y los bolsos (ejem, bolsazos como los Twin Pocket Tote, Saffiano Lux y Saffiano Classic Tote, todos de Prada, entre otras firmas).

No solo yo, es su público el que la encumbra al top de este ránking. Liv tiene la capacidad de volcar las redes sociales si aparece arranca temporada con un look alejado del que estamos acostumbrados: un sexy bañador blanco de La Perla, gafas de sol de Dior y pelo rizado. Una nueva faceta de Olivia Pope. Y queremos ver más.

La sutil manera de no dejar que asuste a los que la rodean es vestirla de colores claros y, en muchas ocasiones, de blanco. Entre sus marcas fetiche: Armani, Gucci, Valentino, Max Mara, Michael Kors, Ferragamo, Dior, Victoria Beckham, Prada, Donna Karan… La lista es tan interminable como impresionante.  Los 13 o 14 cambios que necesita por capítulo dan para mucho juego. Y a ese sí que me he enganchado, no como al Candy Crush. Lyn Paolo ha desvelado que la combinación blanco y negro es una de las preferidas para vestir al personaje porque representa sus contradicciones internas. ¿Puede ser más coherente?