Para el look  de esta semana nos hemos acercado a la indumentaria elegida por Pedro Sánchez, Secretario General del PSOE, para acudir a El Programa de Ana Rosa el pasado 11 de diciembre. De esta entrevista salió con un TT (#PedroSanchezAR) y un suspenso, el que le pone Patrycia Centeno, periodista experta en el análisis de la indumentaria como herramienta de comunicación política, a la imagen del político.

¿Cuáles son las claves del look de Pedro Sánchez?

El PSOE no sabe lo que quiere (bueno sí, quiere pillar votos de todas partes). Quiere ser distendido, revolucionario y jovial como Podemos pero también conservador y clasicorro como el PP. Esto se percibe rápidamente en el lío indumentario de Pedro Sánchez. La camisa blanca arremangada, el chaleco azul, el jersey rojo, la mochila, la trenca contra un sastre soso, aburrido y mal cortado con botones de traje chaqueta de señora mayor. El estilo de un individuo refleja su personalidad. Hasta que no sepa qué o quién quiere ser y mientras siga dedicándose a imitar a otros, no mejorará y seguirá perdiendo credibilidad. Estamos en un momento en que se necesitan líderes convincentes o, por lo menos, definidos. 

¿Y sus pros y contras?

Pro: Es un hombre atractivo.

Contras: Es un hombre atractivo (la envidia es muy mala) y estilísticamente no sabe sacarse partido.

¿Cómo ha llegado Pedro a este estilo? ¿Qué mensaje nos envían él y su equipo con su indumentaria?

El mensaje es contradictorio y, por lo tanto, no es creíble. Como equipo, no creo que se hayan contemplado ninguna estrategia indumentaria -y si lo han hecho, no han atinado. Supongo que es él mismo el que va probando sin saber cómo hacerlo. 

¿Le recuerda a algún otro político de la historia? ¿Suárez, Kennedy?

Bueno, él pretende ir de Adolfo Suárez (las sonrisas son calcadas). Le iría mucho mejor si empezara a ir de él mismo, denotaría seguridad.

Nos estamos acostumbrando a verle sin corbata. ¿Cuándo decide lucirla? ¿Qué tipo de corbatas elige?

Pierde mucho cuando se pone corbata; entre otras muchas razones, porque como el 98% de los hombres de este país no sabe hacerse el nudo ni escoger el lazo adecuado para cada cuello de camisa.

¿Es adecuado el look que ha llevado para su entrevista en El Programa de Ana Rosa?

Es el look que lleva la mayoría de políticos en televisión, salvo que se ha quitado la corbata (lo malo es que esto en este país ya no impresiona, ha llegado tarde). Creo que hay gente que desconoce que hay otras alternativas a la americana (chaqueta de punto o lana, cazadora, chupa...) y la corbata (fular, pañuelo…). La izquierda española (o la que pretende ir de izquierda) debería echarle un vistazo a Xosé Beiras.

¿Hasta qué punto debe un político relajar su imagen para televisión? 

Siempre advierto que a un político no hay que vestirle para la tele sino para el mensaje que desea transmitir, el estilo de programa al que acude y cómo se siente el modelo (político) ese día.   

¿Qué nota le pondría en general? 

Un 4.

La pasada semana pudimos ver a algunos líderes internacionales a los que se les transparentaban las camisetas interiores bajo las camisas blancas. ¿Qué opina?

Yo no se la he visto a Pedro Sánchez, pero, al igual que Pablo Iglesias, resulta cansino verlo con la camisa arremangada todo el día. Pretende que no se lo compare con nadie, pretende destacar pero acaba mimetizándose con los demás. Si quiere ir de novedoso,  original y alternativo, mejor buscar otros recursos estéticos (más cuando éstos ya los utilizaba la izquierda a principios de siglo). 

¿Qué opina de su presencia mediática?(La polémica llamada a Sálvame, su próxima aparición en Planeta Calleja)

La veo magnífica. Estamos en el siglo XXI, los políticos deben bajar del pedestal (quitarse el uniforme diplomático occidental impuesto en el siglo XIX) e interactuar  con (parecerse a) la plebe. Obviamente, hay que elegir bien las intervenciones y los escenarios porque una imagen queda para siempre; pero él acababa de aterrizar y necesitaba hacerse notar. 

¿Quién es el político mejor vestido? 

Tengo una larga lista pero para demostrarle a Pedro Sánchez que se puede ser clásico -clásico en plan elegante, no en plan cateto- sin dejar de ser subversivo, Salvador Allende.  “El camino hacia la revolución precisa de luchadores conscientes, no mal vestidos”, dijo. Pues eso. 

*Patrycia Centeno es autora de Política y Moda, la imagen del poder (Península, 2012) y Espejo de Marx, ¿la izquierda no puede vestir bien? (Península, 2014). www.politicaymoda.com