Cada vez que regresa a la programación protagoniza una gran cantidad de titulares. Pedro García Aguado, el Hermano mayor de Cuatro, es uno de los grandes éxitos de la cadena. Sin embargo, se mantiene escondido en los viernes, uno de los días de menos con consumo televisivo, pero también uno de los días más apegados históricamente a la programación de Cuatro.
El programa cierra esta temporada con un 11,9% de cuota de pantalla media y 2.066.000 espectadores (a falta de la audiencia de su último programa). Se trata de su tercera mejor temporada, desde que se estrenase en 2009.
El programa bajó notablemente el pasado año, en su sexta temporada, marcando un 7,7% de cuota media y 1.399.000 espectadores en la noche del viernes. Ese año, el programa sufrió numerosos cambios en la parrilla de Cuatro, lo que hizo que los espectadores desconectasen en muchas ocasiones.
El pasado año, el programa cambio de horario cuando se emitía un partido de la Liga de fútbol, emitiéndose más allá de las 22:00 horas. También lo hizo cuando Deja sitio para el postre cambió a la noche de los viernes, y Hermano mayor pasó a emitirse después del programa de Raquel Sánchez Silva. Un maltrato que fue castigado por los espectadores.
Este año, el programa ha mantenido en todo momento su horario, lo que ha sido premiado por los mismos espectadores, provocando la mayor subida de una temporada a otra y colocando Hermano mayor como uno de los programas más vistos de la cadena. Su media sólo es superada en prime time por Adán y Eva o por ¿Quién quiere casarse con mi hijo?
Los jóvenes, sus mejores aliados
El programa tiene tirón entre los más jóvenes de la casa, los verdaderos protagonistas de las historias. Hermano mayor llega a liderar por encima del resto de las ofertas entre el público de 4 a 54 años. Su mejor dato lo hace entre los jóvenes de 13 a 24 años, donde ha marcado esta temporada un 24,9% de cuota de pantalla media.