Todo sucedió muy rápido. El actor Carlos Areces aparecía el pasado sábado en la alfombra fucsia de los Premios Goya portando un lazo naranja en la solapa de su chaqueta como defensa a los trabajadores de TVE. Sin embargo, y aunque estuvo allí, el actor no posó en el photocall ni entró en el audotorium.
Según Aníbal Gómez, compañero de Areces en producciones como Museo Coconut o Muchachada Nui, el actor tenía que presentar uno de los premios de la noche, pero finalmente la organización no le dejó hacerlo si no firmaba un documento que aseguraba que no se saltaría el guión establecido.
Bluper se ha puesto en contacto con la Academia de Cine. Emiliano Otegui, productor ejecutivo de la ceremonia y encargado de dar las pertinentes indicaciones a Areces, ha querido explicar lo ocurrido desde su punto de vista para este portal.
Según Otegui, a Areces se le pidió firmar una hoja para ceder los derechos de imagen, algo que se le pidió al resto de entregadores, un total de 66 personalidades del mundo de la interpretación que se subieron en el escenario. En dicho contrato hay una clausula en la que se acepta seguir el guión establecido por la organización, algo a lo que se negó Areces.
La gala dura demasiado y no podemos controlar lo que dicen los premiados
Ante esta negativa, Otegui se negó a que Areces entregase el premio. El actor tenía que subirse al escenario junto a Andrés Velencoso y Antonio Velázquez, que presentaron el premio a Mejor Actriz Revelación a Nerea Barros, por La isla mínima. “La gala dura demasiado y, ya que no podemos controlar lo que dicen los premiados aunque se les pida un minuto de intervención, hay que controlar lo que dicen los entregadores. Esto es como el guión de una película”, asegura Otegui.
Para el productor ejecutivo, nada tiene que ver el lazo naranja que portaba para que se tomase esta decisión. “No tiene absolutamente nada que ver. Todos los entregadores la firmaron y Areces ya se le pidió durante los ensayos del viernes, cuando no llevaba el lazo. También se negó. No hubo nunguna persecución”, declara Otegui ante esta situación.
Areces pidió estar en el backtage. Pero al no estar entre los entregadores no podía estar allí
Aníbal Gómez, en su acusación, también aseguró que después de esta negativa de la organización tampoco se le dejó sentarse en la sala ni estar en el backtage. Otegui explica que durante los ensayos se le pregunta a los entregadores si quieren sentarse en el teatro o estar en el backtage durante la gala. “Areces pidió estar en el backstage. Pero al dejar de ser entregador ya no podía estar allí. Y, tal y como pidió, no se le reservó asiento en la sala”, ha expresado el productor ejecutivo.
“Pidió un coche y se fue”, asegura Otegui a este portal. “No tengo ninguna intención de hablar con él de este asunto”, declara el productor cuando se le pregunta por su relación con el actor en estos momento.