Lidia Folgar fue eliminada la semana pasada en la semifinal de MasterChef, pero quiere dar que hablar también durante la final de este martes. La concursante fue la sexta clasificada, por detrás de Kevin y los cuatro finalistas que lucharán por ganar la final, y se ha ido con una sensación agridulce por haberse quedado "a punto".
Así lo ha declarado ella misma en una entrevista concedida a Diario Información, donde también ha aprovechado para sacar los trapos sucios que ha habido en el programa. Lidia asegura que se sorprendió por su eliminación porque no le explicaron los motivos. "Se me dio a entender que yo no iba a aprovechar tanto el premio como otros concursantes. Para que no me colara en la final", afirma.
No quería dejarme humillar, no me gustaba que se valorasen otras cosas que no son la cocina
"De la expulsión tengo mal sabor de boca porque ese día no me lo esperaba. Estaba contenta con el trabajo, había buenas críticas, los comensales nos habían elegido y ese día me pilló totalmente por sorpresa".
Y carga precisamente contra el jurado, con quien afirma que tuvo una relación peor de lo que le habría gustado. "Desde el principio me entraron mal y yo tampoco estaba muy receptiva con ellos. No me gustaban las formas, que a veces rozaban la humillación. Pero no solo fue conmigo, lo veía con otros compañeros y no me gustaba. No quería dejarme humillar, no me gustaba que se valorasen otras cosas que no son la cocina".