El buen rollo que tenían Han y Aritz ha vuelto a desvanecerse. Aritz estaba convencido de que entre ellos existía una amistad que iba a continuar fuera de la casa y al mismo tiempo que planeaba con Han cómo iba a ser su pisito de solteros, le ha confesado sus fantasías sexuales y su relación ha dado un giro de 360 grados. Han parece tener claro quién es la persona especial de Aritz y no le hace ninguna gracia imaginárselo con ella.
Hace tan solo unos días, Aritz entraba en el confesionario y le ha dejado claro al Súper que él se llevaría a Han al fin del mundo y que está seguro de que fuera de la casa van a seguir siendo amigos porque ya han hablado de irse a vivir juntos. Sin embargo, Han le ha dicho al Súper que no está seguro de que Aritz vaya a ser su amigo fuera de la casa, algo que a Aritz le ha sentado muy mal después de que ya hubieran hablado de compartir piso en Madrid cuando salieran del concurso.