Ya lo hizo el PSOE y ahora ha sido el turno de Podemos de presentar su modelo de RTVE en el Congreso. Este jueves, el partido de Pablo Iglesias presentó en la Cámara Baja una Proposición no de ley con los preceptos que creen indispensables para la televisión pública estatal.

Según esta propuesta, el Presidente deberá volver a ser elegido por dos tercios y deberá venir apoyado por un proyecto de futuro de RTVE. En caso de que haya bloqueo como ocurrió en 2012 y se supere el plazo de cinco meses sin relevo, Podemos propone que sea la ciudadanía la que vote al Presidente mediante voto electrónico seguro eligiendo entre los candidatos que superen la fase de concurso público. Seguiría el estilo del Defensor de la audiencia, que será directamente elegido por los ciudadanos.

Podemos propone que los ciudadanos elijan mediante voto electrónico al Defensor de la audiencia, dos miembros del Consejo Social y al Presidente si hay bloqueo

La fase de concurso público no solo será para el Presidente sino también para los miembros del Consejo de Administración. Todos ellos deberán demostrar méritos en su trayectoria profesional. Un tribunal ad-hoc, formado por profesionales independientes de acreditada trayectoria y elegidos por sorteo para cada ocasión de entre los propuestos proporcionalmente por cada grupo parlamentario, serán los encargados de la evaluación.

Los partidos políticos tendrán representación en el Consejo de Administración pero, entre todos, no dispondrán de la mayoría. Cada grupo parlamentario dispondrá de un consejero hasta un máximo de un 49% en total para garantizar la independencia.

También otros dos consejeros que representarán a los trabajadores de RTVE. Estos serán elegidos por votación directa junto con el Consejo de Informativos, Mesa de producción o el referéndum sobre el Jefe de informativos. Este último punto cambiará a como era hasta ahora, ya que tendrá carácter vinculante y si los trabajadores no le aceptan podrá ser rechazado.

Podemos también quiere un Consejo social

Podemos también quiere la creación de un Consejo social que vele por los principios generales de la radiotelevisión pública. Sustituirá al actual Consejo Asesor y tendrá mayores competencias. Sus miembros serán propuestos y votados por asociaciones sin ánimo de lucro representativas de sectores significativos de la sociedad española excepto dos de ellos, que también serán votados por los ciudadanos a través de voto electrónico.

También este proyecto busca dar mayor transparencia a RTVE. Para ello, habrá un "estricto reglamento de incompatibilidades" que ayude a prevenir todo conflicto de intereses. "Todo gasto contable deberá figurar en un portal web de transparencia permanentemente accesible y actualizado cada tres meses, incluyendo todos los salarios, el coste detallado y completo de toda la programación y todos los contratos de externalización".