Nunca Eurovisión había alcanzado una polémica tan alta como para que el Gobierno haya tenido que interceder. La polémica se desataba este viernes por la mañana cuando se hacían públicas las normas del próximo Festival, donde se anunciaba la prohibición de la ikurriña en el estadio de Estocolmo.
Desde el Gobierno Vasco anunciaban su intención de recurrir esta decisión, mostrándose muy molestos con la actitud que se ha tomado desde la UER, equilibrando la bandera vasca a la del Estado Islámico, por ejemplo.
La propia vicepresidenta del Gobierno en funciones ha tenido que salir ante los medios de comunicación para dar explicaciones después del Consejo de Ministros. "Le hemos pedido al ministro de Exteriores que se ponga en contacto con el Gobierno sueco para arreglar este asunto. Además, nos hemos puesto en contacto con el presidente de RTVE. No pueden tratar la bandera de este modo", ha señalado Soraya Sáenz de Santamaría.
Desde Al rojo vivo han tratado esta particular polémica y han anunciado que el Gobierno vasco da por aclarado este asunto y que en las próximas horas se anunciará que la UER ha rectificado y eliminará la bandera de esta lista de prohibiciones.