Belén Rueda vive un gran momento profesional. Al éxito de La embajada en Antena 3 hay que añadirle el premio del público del 19 Festival de Málaga a la última cinta que protagoniza, La noche en la que mi madre mató a mi padre. Curiosamente, en ambos proyectos ha coincidido con dos de sus excompañeras en Periodistas: Alicia Borrachero y María Pujalte.

“¡Sí! Me reencuentro con Alicia. Lo que pasa es que en La embajada tenemos muy pocas secuencias juntas”, comenta la actriz a este portal. “Estábamos en Periodistas y yo estaba embaraza de mi hija, que ahora tiene 17 años. Fíjate si hace tiempo”.

Hay un 10% de directoras nada más. Y en guión también.

También existen coincidencias entre la serie y la cinta. “En la película hablamos de la problemática de las mujeres de 40 años que parece que no consiguen personajes protagonistas. Y esta serie es de mujeres con poder. Y eso es algo que me encanta”, confiesa.

Yo he tenido suerte. Cruzo los dedos porque he tenido la suerte de trabajar con directores y guionistas con una sensibilidad estupenda. No me puedo quejar. Pero hay un 10% de directoras nada más, en guión también”, protesta.

“Es una cosa que en este país pasa en cualquier sector. Parece que la experiencia es un valor que no se tiene en cuenta. Lo hemos visto en la crisis con gente de edad que le ha costado encontrar trabajo”, continúa.

Comedia por primera vez

Pero, como ella misma reconoce, no ha sido su caso. De hecho ha tenido la oportunidad de de hacer comedia en cine por primera vez en su carrera. “En cine no había hecho comedia. En Los Serrano hacía comedia, pero era la seria. Y en esta cinta soy la más loca. Y ha sido una delicia trabajar con la directora y los actores”.

En la cinta, Rueda interpreta a Isabel, una actriz que pasa los 40 que se debate entre su necesidad de sentirse valorada profesionalmente, sus inseguridades, su temor a envejecer, su coquetería y sus contradicciones.

Una noche lsabel es la anfitriona de una cena muy especial: su marido Ángel, que es guionista, y Susana, la ex-mujer de Ángel, y directora de cine, quieren convencer al actor argentino Diego Peretti para que protagonice una película. Pero en un momento dado ocurre algo inesperado que sorprende a todos y perturba la velada.