Comienzan los preparativos para la cuarta edición de La Voz en Telecinco. En pocas semanas arrancan las grabaciones de las audienciones a ciegas y la cadena ya ha anunciado quiénes serán los coaches este año. Hay algunas bajas, algunos repetidores y algún que otro regreso sonado.

Alejandro Sanz, Malú, Melendi y Manuel Carrasco serán los coaches de la cuarta edición de La Voz, concurso que próximamente iniciará sus grabaciones con Jesús Vázquez al frente.

Acumulan décadas de experiencia en el mundo de la música, en el que han conseguido tanto el reconocimiento del público, con varios millones de copias de discos vendidas, como de la industria, que les ha concedido muchos de los más prestigiosos premios. Su próximo objetivo será utilizar todo el aprendizaje adquirido a lo largo de sus carreras y durante sus diferentes participaciones en el concurso para formar el mejor equipo de voces posible y luchar por conseguir la victoria final en el concurso musical de mayor éxito de la televisión actual.

Producida por Telecinco en colaboración con Boomerang TV y Talpa, la última entrega de La Voz (24% de share y 3.521.000 espectadores) mejoró en casi un punto y más de 100.000 espectadores a su antecesora (23,2% y 3.406.000) y lideró ampliamente su franja de emisión con más de 11 puntos de ventaja sobre su principal competidor.

La cuarta edición del formato contará con el regreso de Melendi, coach en la histórica primera edición del formato, y la incorporación de Manuel Carrasco, tras su destacado paso por La Voz Kids 2, a un equipo de coaches en el que repetirán Alejandro Sanz y Malú, ganadora de La Voz 2, con David Barrull, y de La Voz Kids 1, con María Parrado.

Los cuatro artistas iniciarán en las próximas semanas su participación en La Voz 4, espacio que volverá a contar con la colaboración de Tania Llasera, en las grabaciones de las ‘Audiciones a ciegas’, primera fase del programa en la que tendrán que formar sus respectivos equipos seleccionando entre un amplio grupo de candidatos las voces más cualificadas y con mayor personalidad sin mantener contacto visual alguno con los aspirantes hasta el momento de su elección. Una vez formados los equipos, los coaches deberán liderar a sus integrantes en su camino hacia la gran final.