TVE necesita más Maras Torres y menos Marías Casado
Hace unos días, cuando publicábamos que el número tres del PSOE al Congreso por Madrid, Antonio Hernando, había reñido a María Casado porque TVE no había emitido los audios de Fernández Díaz, un lector comentaba que la presentadora de Los Desayunos de TVE no era responsable de esa decisión.
Es obvio. Pero de lo que no hay duda es que por culpa de periodistas como ella, de esas que piden permiso antes que perdón por no inquietar al político, la televisión pública vive uno de sus peores momentos, desprestigiada y hundida en audiencia.
¿Y por qué digo esto? Sólo hace falta ver su actitud ante la regañina de Hernando para darse cuenta de que la televisión pública no necesita a periodistas así. Inmóvil, como si la cosa no fuera con ella. Con pose de ‘me entra por un oído y me sale por el otro’. El mutismo por bandera, como siempre.
Y no podía evitar acordarme del enfrentamiento de Ana Pastor con María Dolores de Cospedal, también en Los Desayunos, cuando le preguntó cuál era el modelo de televisión pública que quería el PP y se enorgullecía de trabajar en una etapa de libertad.
Pero, claro, ¿qué iba a decir Casado? ¿que no se habían emitido los audios porque habitualmente TVE no se hace eco de informaciones cuya procedencia no ha podido comprobar cuando sí que lo hacen si los audios perjudican a la oposición? ¿Iba a decir que se enorgullecía de trabajar en esta etapa? Lo mejor, callar.
¿Qué más hace falta, querida María, para que profesionales como tú o Ana Blanco alcéis de una vez la voz contra la manipulación que se vive en TVE? ¿Cuándo seguiréis el ejemplo de gente como Mara Torres y su equipo de La 2 Noticias que se han rebelado contra la dirección de informativos y han decidido emitir los polémicos audios?
Recuerdo hace dos años como la compañera Mariola Cubells relataba en un artículo titulado El cierre de Canal 9, en tres actos que muchos de los periodistas que aparecían protestando por el cierre del canal autonómico nunca antes se habían movilizado para protestar contra la manipulación.
“Todo lo contrario, durante años, CONTRIBUYERON precisamente a consolidar el modelo que ahora, oh fatalidad, también los va a dejar a ellos en la puta calle. NUNCA dijeron nada sobre las omisiones informativas flagrantes y clamorosas. Se comieron TODO lo que había que comerse, acataron órdenes intolerables, fueron esbirros, cenutrios, pelotas, periodistas sin alma y sin criterio. Mercenarios”.
Y eso es precisamente lo que ocurre en TVE. Periodistas sin alma y sin criterio han tomado nuestra televisión para ayudar a sus jefes a dejarla tan herida que sea imposible volver a levantarla. Con su silencio, con sus actitudes impasibles, contribuyen a esta lenta muerte de la televisión de todos.
...Cuando vinieron a buscarme,
no había nadie más que pudiera protestar...