Quince años después de Operación triunfo, la vida le vuelve a sonreír a Rosa López. Este año, la cantante se convierte en concursante de la quinta edición de Tu cara me suena y volverá a ponerse en la palestra gracias al reencuentro que TVE prepara del programa que la vio nacer como artista. Para presentar la nueva temporada del programa de Antena 3 en el FesTVal de Vitoria, la cantante ha querido hablar sobre cómo han sido estos años para ella que ahora le toca repasar.
"Estoy en una etapa muy importante de mi vida. Me siento muy fuerte. Me siento más consciente de muchas cosas. Que estemos grabando el documental de Operación triunfo está siendo como una terapia", dice la cantante cuando apenas se le ha preguntado por lo que significa este nuevo proyecto profesional para ella.
Sigue siendo tan inocente como antaño. Todavía se sorprende cuando ve un montón de grabadoras queriendo escuchar lo que tiene que decir. "Si ahora intento meterme en aquella Rosa, ni yo misma puedo imitarla. No veo ni un vídeo en internet por mi padre ni por ver cómo cantaba. No es que no lo supere, pero es que ahora tengo algo muy bonito", cuenta con la voz entrecortada.
Asegura que no puede ver ningún vídeo de aquella época. "Parece que tengo dos dedos de frente". Sin embargo, el documental sobre le reencuentro está siendo toda una terapia. "Ahora me quiero mucho, antes no me daba cuenta. A lo largo de estos años he ido supliendo esas carencias y me hecho fuerte. Tienes que darte cuenta de que eres culpable. Hay que quererse", declara la artista.
No sé cómo pude empezar una profesión con tantas carencias
"No sé cómo pude empezar una profesión con tantas carencias. Ahora, de nuevo, la vida abre un nuevo círculo", describe su momento personal y echa la vista atrás para hablar de sus inicios en el mundo de la música. "Tengo la palabra éxito cruzada. Hay que tener éxito pero es muy importante fijarse en los errores haciéndolos positivos".
No tiene miedo a la hora de admitir que en estos últimos años ha dado muchos palos de ciego. "Como todo es relativo hasta el día que nos muramos, a veces creo que me arrepiento de algunas decisiones pero luego pienso que eso me ha llevado hasta aquí", contesta.