Sálvame Deluxe despidió este viernes, 11 de noviembre, a Cristina "La Veneno", pero quizá no como esta se merecía. El plató del programa de Telecinco presentado por Jorge Javier Vázquez se convirtió en un auténtico esperpento ávido y hambriento de carnaza, decidido a airear todos los trapos sucios que pudieran deshonrar la memoria de la musa de Pepe Navarro.
El espacio producido por La Fábrica de la Tele comenzó con una cruel e innecesaria batalla entre Valeria Vegas y Natalia, dos buenas amigas de Cristina de dos de las diferenciadas etapas que la vedette vivió en este mundo. Minutos después de arrancar el programa, Natalia, colega de "La Veneno" cuando esta se dedicaba a hacer la calle, atacó a la biógrafa de la almeriense, afirmando que Cristina jamás la había nombrado en su presencia y que estaba intentando subirse al carro de la fama para hacer caja a costa de su compañera.
Valeria, por su parte, sin entrar demasiado al trapo, declaró haberse mostrado muy reacia a acudir al plató del programa de Telecinco y que todo el dinero recaudado ante su paso por el Deluxe iría a parar a una asociación que ya está organizando la despedida que Cristina nunca llegará a tener por culpa de sus familiares.
Por otro lado, las cámaras del programa no se cortaron ni un pelo a la hora de invadir la casa de la excolaboradora de Esta noche cruzamos el Mississippi mientras esta estaba en coma, atacando su privacidad, filmando el deplorable estado de la vivienda en la que vivía la diva y su pareja. Poco después, parte de un freakshow perfectamente orquestado, el programa estalló una bomba con la que Kiko Hernández llevaba cebando a los espectadores de Sálvame durante toda la semana, mostrando la dura reacción al fallecimiento de Cristina del que, hasta este miércoles, fue su novio mientras una redactora del programa intentaba sacarle declaraciones.
Todo esto aderezado con una fría despedida de Pepe Navarro, que se negó a acudir al plató del Deluxe; y una serie de fechas y datos falsos e incongruentes proporcionados por Kiko Hernández, obsesionado con cargar contra la familia de "La Veneno", intentando calentar el ambiente para una más que posible e inminente visita de los parientes más cercanos de la almeriense al programa.
Pese a lo mencionado anteriormente, el resultado de la despedida televisada de Cristina no fue funesto en su totalidad. Entre los pocos momentos de la velada en el que programa supo y quiso decir adiós a la estrella con dignidad fue el momento en el que el programa tiró de hemeroteca. Una brillante y lúcida María Patiño sacó a relucir su capacidad comunicativa tirando de archivo, contextualizando a los espectadores con un viaje en forma de documental que relató el ascenso a la fama y el posterior descenso a los infiernos que pudieron costarle la vida a "La Veneno".