Jordi Évole fue muy insistente este domingo. En uno de sus Salvados más reivindicativos, el periodista quiso sacar a la luz la cara más desconocida de Mercadona, los grandes almacenes que más triunfan a lo largo y ancho del país. Con declaraciones de trabajadores y proveedores de productos, Évole puso sobre la mesa las excesivas condiciones que pone el gigante de la alimentación.
Una de las entrevistas con más jugo de la noche fue la que Évole le hizo a dos trabajadores que hablaron de los problemas que existen en Mercadona cuando uno se presenta como la cara visible de un sindicato o cuando un trabajador se tiene que coger una baja por enfermedad.
"Te persiguen al pedir la baja. Existe una prohibición no escrita de caer enfermo", contó María, una de las trabajadoras más críticas con el trabajo en el que todavía se mantiene. La mujer es uno de los casos más polémicos de Mercadona y que más se ha movido por las redes sociales después de que denunciase los malos tratos recibidos por sus superiores al haberse presentado al sindicato CIG.
Mario, un trabajador que en este caso ya no sigue trabajando en los supermercados, llegó a asegurar en el programa que cuando te coges la baja te meten en una lista en la que añaden a tu expediente un T de terrorista. Marcado para siempre, "utilizan otro tipo de herramientas para justificar el despido por otra vía", aseguró el ex trabajador.
Con estas dos historias bajo el brazo, Évole se reunió con el equipo de relaciones exteriores de Mercadona y ver así qué tenían que decir. Se defendieron con cautela y midiendo muy bien sus palabras. "Casos contados no pueden oscurecer la trayectoria de Mercadona", declaró Patricia Cortizas, directora de Relaciones Externas de los supermercados. "Hay un convenio de empresa y cualquier despido que realiza la compañía tiene que tener unas causas muy tasadas y recogidas", aseguró la representante de la compañía.
Sobre la imposibilidad de cogerse una baja en Mercadona, Cortizas declaró en el programa de laSexta que existe un índice de absentismo de un 1,5% "porque tenemos un gran equipo de médicos". Una empresa con más de 70.000 trabajadores, Évole le preguntó a los trabajadores críticos si esto era una práctica generalizada. Aseguraron que, después de hablar con compañeros de toda España, todos estaban en la misma situación.
Desde el equipo de Mercadona intentaron desmentir esta situación de la que hablaban los críticos, diciendo que no se ha despedido al jefe de María porque, después de hablar con el resto de su equipo, todos hablan del buen ambiente que se respira en ese Mercadona. "Es un médico de la seguridad social el que da el alta o el baja. Nosotros no podemos entrar en esa decisión", declaró la representante de la compañía.
Las dos caras de los interproveedores
Uno de los momentos más destacados del programa fue cuando Évole entrevistó a dos líderes de empresas provedoras de productos a Mercadona. La empresa trabaja en exclusiva con las dos y, sin embargo, su felicidad es bien diferente. Mientras el que dio la cara hablaba de las bondades de trabajar con el gigante de la alimentación, de lo que habían subido sus ingresos en estos años, el que se ocultaba tras una sombra contó cómo le aprietan las tuercas desde Mercadona.
"Mercadona tiene un negocio redondo: si hay pérdidas son tuyas, pero si hay ganancias se llevan una parte", llegó a decir el proveedor crítico con la compañía. "Venían unos hombres de negro, sus economistas, que sabían perfectamente lo que estabas ganando", aseguró en su intervención. "No era tu empresa, era su empresa".