La audiencia ha decidido que la undécima expulsada de Gran Hermano 17 sea Adara. La concursante ha sido eliminada por el público tras una ajustada nominación en la que se batía en duelo con Alain.

Con un porcentaje de poco más del 50%, la concursante abandona el concurso para reunirse con Pol y Bárbara, sus grandes apoyos en el reality, que se despidieron de la casa hace ya una semanas.

Los celos, protagonistas de su entrevista

"Tengo celos, pero no tengo una enfermedad", ha afirmado Adara al enfrentarse a su paso por la casa en el plató de Gran Hermano 17 junto a Jorge Javier Vázquez.

Este ha recomendado a Adara que se ayude a sí misma tras ver una ristra de vídeos en los que la exazafata desconfiaba de Pol en múltiples momentos de su convivencia en la casa.

"Roza lo patológico, lo enfermizo", ha puntualizado el presentador del concurso, a lo que Adara solo ha podido responder con una negativa.

Cierra el club

Adara ha dejado su plaza en el club a Meritxell, la única concursante de la casa de Gran Hermano 17 que aún no había pasado por la sociedad secreta del concurso.

Su alegría ha durado poco ya que este ha cerrado sus puertas hasta la gran final del formato, donde jugará una parte fundamental.