Aunque muchos tenían la mirada puesta en descubrir quién era el asesino de Mar de plástico, lo cierto es que La que se avecina también decía 'has pronto' a los espectadores con el último episodio de su novena temporada. La comedia de Telecinco cerraba un ciclo con cambios muy importantes en Mirador de Montepinar que afectarán a los siguientes episodios. 

A los guionistas de La que se avecina siempre les gusta dejar muchas incógnitas en los episodios finales para descubrir qué ha pasado y cómo han reaccionado los vecinos en la nueva temporada. En este caso, uno de los elementos más importantes fue el disparo que recibió Teodoro, el hermano de Amador, en plena calle por el sicario contratado por la Cuqui. Parece que ha muerto. ¿Se quedará Alba sin su gran amor?

Otra que se despedía, esta vez sin accidentes, es Doña Fina (Petra Martínez). Después de los numerosos disgustos que le ha dado a sus vecinos en estos últimos episodios, el personaje abandonaba el edificio de la mano de su hijo asegurando que se iba a un centro para estar mejor cuidada. Los vecinos lo celebran con una gran fiesta, pero puede que se vuelvan a encontrar con la temida vecina dentro de poco.

A cambio de tantas marchas, el edificio tiene que empezar a rellenar sus pisos. Por eso Menchu (Loles León) y Yoli (Miren Ibanguren) son perfectas para este vecindario de locos. Ambos personajes eran las nuevas incorporaciones de la temporada, pero sus tramas giraban en torno a algunos personajes de forma externa. Ahora son propietarias y podrán acudir a las juntas de vecinos.

Las dos se han comprado por sorpresa el piso de Judith (Cristina Castaño). Enrique se quería quedar con el piso de su ex mujer, pero descubre que ya tiene nuevas inquilinas dentro que le aseguran haber comprado la propiedad. Parece que la historia de estas dos mujeres, madre e hija, todavía tiene mucho que decir en la próxima temporada de la serie.