Antena 3 quiso hacer del final de Velvet algo mágico. Y para ello hizo algo insólito: emitir parte de su final en directo. Una idea que mantuvo en vilo no sólo a sus espectadores tradicionales, sino a todos aquellos que querían comprobar si a los actores se les escapaba alguna risa o se equivocaban en una línea del guión.
Sin embargo, para disgusto de algunos, todo salió a la perfección. Se notó el directo, que era un poco teatrillo. E incluso hubo nervios, sí. Pero precisamente era justo lo que los responsables querían trasladar a los espectadores: los nervios previos de una boda.
Entre lo más destacable del directo fue el momento en el que Asier Extxeandía (Raúl de la Riva) se permitió el lujo de romper la cuarta pared y, tras descorchar una botella de champán y vertérsela encima, miró a cámara para lanzar un guiño a la audiencia.
Tampoco pasó desapercibido cómo el pelo de Paula Echevarría creció en cuestión de segundo en el directo. En las escenas previas grabadas, su personaje Ana Rivera llevaba el pelo corto. Sin embargo, ya en el directo, a la joven le había crecido tanto el pelo por arte de magia que podía llevar un recogido.
Por lo demás, la serie tuvo un final feliz cargado de mucho amor. Ana y Alberto (Miguel Ángel Silvestre) pudieron casarse al final tras cinco años separados. Mateo (Javier Rey) y Clara (Marta Hazas) decidían no firmar los papeles de divorcio y darse una nueva oportunidad. Los 'malos' Enrique (Diego Martín) y Patricia (Miriam Giovanelli) daban rienda suelta a su pasión. Y hasta Emilio (José Sacristán) y Blanca (Aitana Sánchez Gijón) afianzaban su amistad.
El punto triste lo puso el personaje de Rita (Cecilia Freire). Y es que, después de haber superado un cáncer, la costurera tenía un desmayo en la boda de Ana y Alberto, que obligaba a cancelarla. Para no amargarles tan mágico día, la joven decidió mentirles y decirles que había sido una simple anemia. Sin embargo, al final del capítulo los espectadores descubrían que había vuelto a ser diagnosticada con dicha enfermedad.