Australia ha elegido a su representante para Eurovisión. Tras su exitoso periplo por el concurso, Isaiah Firebrace ha sido escogido por la televisión pública de la isla de manera interna para intentar, de una vez por todas, llevarse el gato al agua.

El joven cantante, que ganó la adaptación australiana de The X Factor en 2016, interpretará el tema Don't Come Easy, una balada de tintes épicos con el que intentará conquistar Kiev.

"Estoy muy orgulloso de representar a Australia en Eurovisión. A pesar de que ha sido siempre un sueño para mí, nunca pensé que llegaría a convertirse en realidad. Ser capaz de compartir esta noticia con mi familia y amigos es increíble. Voy a hacer que Australia se sienta orgullosa de mí", ha señalado el joven intérprete de 17 años tras hacerse oficial su candidatura este mismo 7 de marzo.

Australia seguirá participando en Eurovisión

Tras coquetear en varias ocasiones con el Festival, Australia participó por primera vez en Eurovisión como concursante de pleno derecho en 2015, como invitado especial con motivo del 60 aniversario del concurso, finalizando en un meritorio quinto puesto con el tema Tonight Again de Guy Sebastian.

La gran aceptación de su participación en el certamen ha llevado a la UER a tomar la decisión de invitar a la isla a participar de nuevo en 2016 y 2017.

El pasado año, la coreana Dami Im estuvo a punto de llevarse el gato al agua y ganar el Festival, rozando la victoria al quedar en segundo puesto y convertirse en la favorita del jurado especializado.