Torito se encuentra viviendo uno de los momentos más dulces de su vida. El colaborador televisivo acaba de "dar a luz" a su primer hijo y a su primera novela autobiografíca.
En Ácido, el catalán revela detalles de su infancia, desnudando su terreno más personal, y se atreve a destapar los detalles más íntimos de su paternidad y de sus inicios en el mundo audiovisual.
Abandonando su alter ego televisivo, Quique Jiménez ha decidido desnudarse en BLUPER respondiendo a las preguntas de este portal. ¿Qué opina del panorama televisivo actual tras más de 15 años vinculado al mismo? ¿Es realmente el autor de su novela autobiográfica? ¿Puede un escritor vivir de sus creaciones?
¿En qué momento decide uno escribir un libro de su vida?
Es un proyecto que sale desde la editorial. Me proponen hacer un libro para lanzarlo el 15 de febrero, justo el día que yo cumplía 15 años en la tele. Por eso estaba muy orquestada la forma de sacar el libro, tenía que ser ese día de ese año y no había nada casual. Y fueron ellos los que me propusieron el tema. A partir de eso, uno se pone a escribir y eso y sale un poco todo lo que ha salido.
¿Te daba miedo desnudarte a ti mismo ante el televidente que igual no conoce los aspectos más personales de tu vida?
Sí. Realmente soy un tío muy sincero en todos los aspectos de mi vida, pero el libro tenía que enfocarse de manera que contara todas mis intimidades. Cuando me puse a escribir empecé a entender que no tenía sentido que la novela no hablara realmente de mí y, finalmente, Quique acabó ganando la batalla a Torito. He sacado de mí más cosas de la cuenta. Cuando lo estaba terminando sí que tuve un momento de crisis pensando si hacía bien o no explicando más cosas de la cuenta, pero bueno. Uno se tira para adelante y estoy muy contento de la repercusión. Cuando hablas con verdad ves que la repercusión de la gente es recíproca.
¿No da miedo saber que la gente ahora sabe detalles tuyos ahora que antes desconocía?
Sí. Realmente en el libro debo explicarme mucho porque a veces la gente ya me habla de cosas concretas que salen en él por la calle. Me encontré a uno el otro día que me comentó hasta un aspecto de mi marido. Y yo pensé: “¿Tú de qué lo conoces?”. Después me contó que lo había leído en el libro. Pero sí. Te sorprende un poco la repercusión de todo, han colaborado muchísimos artistas en el libro y yo creo que entre eso y que aquí gusta mucho una intimidad, el libro es todo un éxito.
¿Eres el autor real del libro o has sido ayudado por alguien?
Me gusta que me hagas esta pregunta porque realmente nadie me puede demandar como a otros. Mi libro está escrito por mí. He sido yo quien se ha pasado más de 4 meses llorando, riendo y noches sin dormir. Realmente, me jodería mucho que pensaran que no lo he escrito yo, pero bueno, puede ser que lo piensen, sinceramente. Mi padre me dijo que estaba tan bien escrito el libro que si yo no fuera su hijo pensaría que no lo había escrito yo. Imagínate el amor de padre.
¿Has recibido muchas correcciones de la editorial?
Me han cambiado muy poca cosa porque la editorial me ha dicho que tengo una voz tan personal a la hora de escribir que es muy difícil de retocar.Se han quitado 4 faltas y se ha impreso. O sea que no se ha corregido mucho.
¿Tuviste mucha libertad creativa?
Mira, teóricamente, tenía que explicar en el libro los 15 años de mi personaje televisivo, con anécdotas divertidas. Después dije: “Mira, no tiene sentido que haga una autobiografía sin explicar que voy a terminar siendo padre”. Y, a raíz de explicar que voy a ser padre, que ya lo he sido evidentemente, vas tirando un poco del hilo y una cosa va llevando a la otra. Y no podía contar que era padre sin hablar de mi marido, porque ese niño tiene dos padres y se está criando en una familia homoparental. Una cosa ha llevado a la otra y al final tirando del hilo de la madeja se ha explicado todo.
Ahora que ya eres escritor, sabes si realmente se puede vivir del éxito de un libro...
Bueno, ¡ahora que soy escritor! Me gusta mucho esta frase. A mí siempre me han atribuído profesiones que no soy. Me encanta cuando voy por la calle y me dicen “eres periodista”. Yo soy licenciado en Bellas Artes. El resto me ha venido de casualidad, incluso lo de la escritura. Eso sí, que no se ofenda nadie en Sant Jordi si vendo más que ellos, porque no voy a repetir. O sea, esto ha sido una cosa puntual que he hecho porque quería hacerlo. Vivir de lo que escribes es muy difícil hasta para los más grandes. No creo que pudiese pagar la hipoteca con el mundo de la escritura.
¿No tienes más historias en la cabeza o no te han propuesto hacer una segunda parte de esta autobiografía?
Me han propuesto hacer una cosa que tal vez la hagamos, pero es completamente diferente a todo esto. Dejaríamos un poco la parte egocentrista y no hablaría de mí en el siguiente volumen. Y sí que hay una oferta, pero no sé si me voy a meter en eso o no, sinceramente. Soy un tío que tengo muchos miedos. A los cinco días de escribir la obra me paré y pensé: “esta mierda no le interesa a nadie”. Llamé a la editorial y dije que no seguía, o sea que uno siempre tiene miedos.
¿Qué te queda por hacer en la vida o en televisión?
Pues realmente me gustaría seguir viviendo muchos años para estar como estoy ahora. Me considero una persona feliz. He conseguido lo que más quería, que era tener a mi hijo, una pareja estable y que todo me cuadre. ¿Que una programa se termina como QTTF? No pasa nada, doy las gracias por haber estado 8 años allí. Si un programa como Hora punta no cuaja y tienes que abandonarlo en una tarde no pasa nada. Esas cosas las haces cuando eres feliz, cuando no tienes miedo a nada.
Tras 15 años en este medio, ¿como ves el panorama actual televisivo?
Realmente deberían aportar mucho mas por caras nuevas. Hay una nueva generación que viene con mucha fuerza, que acaba de salir de la universidad y es que es muy difícil que tengan hueco. Yo realmente si volviese a empezar de cero no creo que me dedicase al mundo de la tele porque sería imposible conseguir lo que he conseguido esperando que el tren pasase otra vez. Desde que se creó la TDT todo el mundo decía que habría trabajo para todo el mundo pero realmente hay trabajo para unos pocos. Faltan programas transgresores, faltan late shows... Faltan muchas cosas que se podrían hacer. Lo que pasa es que la gente y los medios, desde que están las redes sociales, no quieren mojarse y hacer nada que sea políticamente incorrecto.
Te gustaría que se apostara por caras nuevas, ¿estás en contra de que una misma cadena confíe más de un programa a sus presentadores estrella?
Yo también entiendo a las empresas privadas. Esto es como Almodóvar. Le gusta trabajar con las "chicas Almodóvar", por eso no cambia. Confiando siempre en el mismo presentador se ahorran muchos pasos: ya sabes cómo funciona esa gente y lo bueno y lo malo de cada profesional. Las empresas van a lo seguro. Los cambios a partir de 0 dan mucho miedo pero cada cierto tiempo realmente hay que hacer un cambio en la vida.
¿Y en el caso de las TVE?
Realmente allí sí que tendrían que abrir castings, tendrían que llegar caras nuevas. Hacer un casting público, que fueran a las universidades para ver caras. Yo lo vería perfecto, además. No es que los que entren quiten el trabajo a los que están, porque técnicamente si se organiza bien la cosa hay trabajo para todos.