Esta semana se ha confirmado la intención de TVE de volver a producir Operación triunfo. A partir de septiembre, previsiblemente, dará comienzo una nueva edición del talent musical que todavía mantiene en su poder varios récords de audiencia. El formato regresa a la pública 16 años después de su estreno y seis años después desde que se hiciese la última edición del programa.
Y es que las cadenas han dejado claro que la nostalgia gusta a los espectadores. Sin embargo, vivimos una etapa en la pequeña pantalla en la que, el que más y el que menos, se han apuntado a la moda de hacer revivir viejos formatos. Programas de televisión que tuvieron su tiempo y su espacio. Ante el hecho de no encontrar nuevos formatos de entretenimiento tan potentes, las cadenas han decidido tirar de hemeroteca.
El hecho de hacer renacer Operación triunfo era un secreto a voces dentro de la televisión pública. El haber logrado reunir el pasado año a los 16 concursantes de su primera edición para celebrar sus 15 años hizo que el público se alzase en pie de forma unánime. Esta pandilla volvió a reunir a millones de espectadores alrededor de los televisores y TVE no ha querido perder la oportunidad de tener este tirón mediático para relanzar el formato.
En las próximas semanas se estrenará en Telecinco el programa All you need is love… o no. Tiene título en inglés, jóvenes presentadores, un plató distinto, pero en el fondo sigue siendo la misma fórmula que Lo que necesitas es amor. Aquel programa que presentaron con mucho éxito Jesús Puente e Isabel Gemio en los años 90 vuelve a tener su hueco en la nueva televisión.
Aunque el programa se ha modernizado, incluyendo incluso la posibilidad de buscar una ruptura y no el amor, la caravana que busca la ilusión de los espectadores por los pueblos de toda España sigue intacta.
Y es que después de GH VIP este será el segundo formato que Telecinco hará volver de entre los muertos para volver a probar suerte entre unos espectadores algo más crecidos. El reality de convivencia estuvo en el frigorífico 10 años seguidos, desde 2005. La cadena lo volvía a poner en marcha en 2015 con un claro imán: Belén Esteban.
La cadena hermana de Telecinco no se ha quedado de brazos cruzados ante esta tendencia. Cuatro necesitaba un formato para su sobremesa que levantase unos datos catastróficos. Por eso han abierto la agenda y han buscado a los últimos presentadores que lograron llamar la atención en esta franja y en esta misma cadena: Dani Martínez y Florentino Fernández con su Tonterías las justas.
Atresmedia necesita formatos de entretenimiento
Son pocos los formatos de esta televisión más nostálgica que mantienen el nombre que tuvieron en el pasado. Ya sea por derechos o por querer evitar las comparaciones, lo cierto es que existen programas de antaño escondidos bajo la apariencia de algo moderno. Tenemos el ejemplo de Tu cara no me suena todavía, que ha tomado el nombre del consagrado Tu cara me suena para mantener el éxito de la noche de los viernes. Sin embargo, su mecánica no es otra cosa que un Lluvia de estrellas con nuevas normas.
Ha sido el segundo programa de talentos que Atresmedia ha recuperado de hace algunos años. Y es que Cristina Pedroche cerraba hace algunas semanas la primera edición de Tú sí que sí, la adaptación en laSexta del formato que Telecinco tuvo hace varios años bajo el nombre de Tú sí que vales. Por aquel entonces no era otra cosa que un Got Talent sin derechos de autor.
Pero el grupo con sede en San Sebastián de los Reyes no se ha quedado ahí. Después de probar la eficacia de Homo Zapping en las preuvas de este último año, Neox volverá a tener este programa de televisión en su parrilla con nuevos actores y nuevas imitaciones. Un programa de televisión que dijo adiós a los espectadores hace 12 años. Pero parece que ya no se puede decir adiós para siempre.
Lo cierto es que, aunque muchos de estos formatos zombi no han arrasado en términos de audiencia, lo cierto es que los nostálgicos han conseguido hacerse fuertes en las nuevas parrillas. Por eso no es descabellado que en los próximos meses las cadenas den luz verde a nuevos proyectos que para algunos ya suenen a viejas glorias.