Estuvieron esperando más de siete horas en una fila para poder tener la oportunidad de ser uno de los próximos concursantes de Gran Hermano. Sin embargo, cuando llegó su turno la organización les dijo que ya habían visto a suficientes candidatos y que cerraban el casting. Esto ocurrió en Valencia, lo que provocó que numerosos jóvenes empezaran una pelea que obligó a la organización de Gran Hermano a desalojar las instalaciones. 

Bajo el nombre Revolution, Gran Hermano está buscando a los concursantes que formarán parte de la edición 18 de su reality. Lo está haciendo recorriéndose toda España después de haber pedido a los aspirantes que rellenen un formulario en su web. Esta inscripción les daba acceso directo al casting en la calle, pero no todos tuvieron la oportunidad. 

Alrededor del Hotel Abba Acteón se presentaron casi mil personas. Pero la organización no estaba dispuesta a ver a tantas personas. Cuando 350 candidatos fueron analizados, el proceso de casting se cerró. En ese momento comenzaron los gritos de las personas que allí se encontraban, acusándoles de tongo y pidiendo una explicación. 

Ante esta situación tuvo que acudir la policía para desalojar el hotel, ya que muchos de estos aspirantes no querían abandonar las instalaciones hasta que alguien de la organización les diese una explicación sobre lo sucedido.