El quinto episodio de la séptima temporada de Juego de tronos no ha estado cargado de tanta acción y adrenalina como el anterior episodio. Sin embargo, aunque para muchos espectadores ha podido pasar desapercibido, se ha confirmado la teoría sobre el pasado de Jon Nieve que podría cambiar la historia.
En el póster oficial de la séptima temporada se unía fuego y hielo, algo que bien podría significar la unión de Daenerys (fuego) y Jon Snow (nieve), tal y como se ha visto en los primeros episodios de la serie.
Sin embargo, también podría referirse a la teoría R+L=J que dice que Jon Snow es hijo de Rhaegar Targaryen y Lyanna Stark. Es decir, que el joven lleva tanto sangre Stark como Targaryen, haciéndole la encarnación viviente del hielo y el juego.
Y precisamente sobre ello se ha hablado en Guardaoriente. Durante una de sus sesiones copiando obras en la Ciudadela, Gilly repasa para Sam los diarios del Septón Supremo Maynard, que sirvió al Rey Loco, Aerys Targaryen (padre de Daenerys).
El joven no presta mucha atención a la joven. Sin embargo, esta revela algo que podría convertir a Jon Nieve en el legítimo heredero de los Siete Reinos.
"Maynard cuenta aquí que ordenó una anulación para el Príncipe Ragger, y le volvió a casar con otra mujer al mismo tiempo en una ceremonia secreta en Dorne. ¿Es eso común en el sur?", contaba la joven.
Ese Ragger del que habla Gilly se trataría de Rhaegar Targaryen, el hermano mayor de Daenerys, mientras que la mujer con la que se casó en secreto sería Lyanna Stark. De esta forma, Jon Nieve no sería un bastardo sino hijo legítimo del último rey Targaryen y heredero al trono de hierro.
Esta revelación, además, viene acompañada de la escena en la que se puede ver a Jon acariciando a uno de los dragones de Daenerys, que se muestra servicial con el joven ya que reconoce la ascendencia Targaryen en el Rey en el Norte.